Por: Mario Acevedo Manzano
Ya basta, parece ser el grito desesperado de los Manzanillenses, después de padecer por más de tres años el retraso de las obras por el túnel para transito ferroviario y no solamente el retraso en el tiempo, también, mas de mil millones de pesos pagados por sobreprecio, con lo anterior, queda demostrada la ineficiencia de Ruiz Esparza Secretario de Comunicaciones y Transportes que ya en Manzanillo tiene un segundo Socavón igual al del paso exprés de autopista urbana de Cuernavaca.
Mucho ha aguantado el Pueblo de Manzanillo las corruptelas de las autoridades de la SCT dedicada a contratar empresas españolas pasando sobre las empresas mexicanas como la ICA, misma que está al borde de la quiebra por el malinchismo del Secretario Ruiz Esparza, por ello, la protesta ciudadana realizada el día de ayer por el retraso de las obras del Túnel tienen toda la razón los pobladores y comerciantes del Centro Histórico de Manzanillo cuando no les dejan otra opción para hacer entender a la SCT que cada día postergado por el retraso de la obra se traduce en menores ingresos para los comerciantes y mayor malestar para la población.
La obra pública pagada por el gobierno federal está plagada de corrupción e ineficiencia, es conocido por todos los mexicanos como pagar el diezmo fue un hecho común y corriente en la contratación de las obras del gobierno federal, pero, en los últimos años, no nada más es la mordida del 10% también lo es cambiar al alza el precio de la obra para obtener beneficios ilícitos, cuando desde un principio se debe prever el alza en los costos de los Insumos en las cotizaciones del precio de cada obra.
Los Manzanillenses deben recuperar su capacidad de indignación ante la ineficiencia de la obra pública, no es posible soportar tanto desprecio de parte de las autoridades altaneras que tienen obligación legal de entregar las obras publicas en tiempo y forma, más aun, cuando se trata de obras públicas de interés social como lo es la obra del túnel y después de tantos años de retraso, los Ciudadanos tienen todo su derecho a indignarse y pedir que los funcionarios públicos cumplan con su responsabilidad.
La impunidad, prepotencia y desprecio por el interés público demostrado por el Delegado de la SCT, Guido Mendiburu (hasta el nombre es difícil) ha logrado el repudio de los Manzanillenses y demuestra la calidad de los funcionarios federales que poco o nada les interesa en bien común y buscan el interés personal sobre el interés social.
El Socavón de Cuernavaca sacudió a la opinión pública nacional por la ineficiencia de la SCT en supervisar la calidad de la obra pública contratada, se escucharon voces solicitando la renuncia del titular de la SCT no obstante Peña Nieto lo mantiene en el Poder solapando su ineficiencia demostrada en los mil días de retraso del túnel y mil millones de pesos agregados al precio inicial de las obras.
Gaby Benavides y Virgilio Mendoza acompañaron a los Manzanillenses en su protesta y comparte la indignación del pueblo de Manzanillo, pues, a pesar de sus gestiones, siempre les dieron largas con el ya merito, ahora sí, ya se tiene todo el dinero y muchas más escusas que hartaron a la Ciudadanía
Una obra pública de la importancia del Túnel para los Manzanillenses, de haberse entregado en tiempo y forma, pudo haber sido, un ejemplo de la eficiencia del Gobierno Peñista, su retraso y aumento en los costos es una muestra de la ineficiencia y probable corrupción del actual gobierno federal.
Notas cortas
En la magnífica entrevista del Sr. Carlos Valdez Ramírez al C. Gobernador del Estado se están aclarando mucha información necesaria para conocer la importancia del Gobierno de Nacho Peralta, por ejemplo, se gasta en viajes aéreos a la CDMX para obtener recursos y aumentar la inversión pública federal en territorio estatal, así, ni quien diga nada, es gasto productivo, malo sería si se gastara en bebidas y banquetes como fue el Gobierno de M. Anguiano.
El cese por parte del subprocurador encargado del despacho de la PGR al Fiscal responsable de castigar los delitos electorales es una muestra más como la procuración nacional de justicia está al servicios del Gobierno peñista, que le quede bien claro al Poder legislativo, ahora que nombren al Fiscal General de la Nación. Fiscal para procurar Justicia a los Mexicanos o Fiscal para defender al Gobierno, es la disyuntiva, esa diferencia la deben tener muy presente los Senadores.