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Colima.- Durante todo el embarazo existe normalmente un aumento en las secreciones vaginales provocado especialmente por el aumento de las hormonas; sin embargo, las mujeres embarazadas deberán tomar en cuenta cualquier cambio de coloración y olor en estos flujos, ya que se considera normal el que sea blanquecino, con poco olor, líquido, muy similar al que muchas mujeres tienen en el período premenstrual.
El especialista Jorge Bayardo Parra explicó que si se detecta un flujo vaginal amarillento, verdoso o espeso, con mal olor o acompañado de ardor, picazón, enrojecimiento de la zona genital, puede deberse a una infección que requiera de un tratamiento específico.
“Puede fluir, incluso, un líquido espeso de color achocolatado que puede significar un problema con el embarazo o líquido abundante transparente, que nos sugiera la ruptura de membranas”.
Expreso el médico que por cualquier situación de las antes mencionadas se debe consultar al especialista para un correcto diagnóstico, y tratamiento para que se solucionen rápidamente no generen riesgos para el bebé.
Ruptura de Membranas
En cuanto a las rupturas de membranas, Bayardo Parra explicó que sólo el ginecólogo tratante podrá dictaminar si se tiene esta complicación o solo es una infección, “nosotros lo que hacemos es una revisión por medio del espejo vaginal, revisamos el cuello, pedimos que se haga esfuerzo por parte de la paciente, tomamos líquido y se toma una muestra para demostrar si hay ruptura de membranas o no”.
Aunado a esta prueba, se hace un ultrasonido para verificar si la cantidad de líquido es normal en el bebé, “una vez que las membranas se rompen, significa que el nacimiento del bebé es inminente”.
Comentó que anteriormente en los bebés prematuros se les daba oportunidad durante semanas para darles oportunidad a los pequeños para que concluyeran el embarazo, pero actualmente esos bebés, por el alto riesgo de infección, se les dan esquemas de maduración pulmonar y se buscan medidas que aceleren el crecimiento del bebé, lo que significa una atención intensiva neonatal.
Cabe mencionar que la ruptura de membranas se presenta generalmente antes de la semana 36 del embarazo ya que después de la semana 37 ya es el término del proceso: “cuando se rompe una membrana de la semana 25 hasta la 36, hablamos del periodo de riesgo de obtener un bebé prematuro”.
Las rupturas de membrana se asocian como una consecuencia de una infección vaginal mal cuidada y se ha investigado que hay infecciones subclínicas que debilitan las membranas, un esfuerzo, un cuadro de tos o incluso pequeñas contracciones, pueden provocar la ruptura de estas membranas.
DR. JORGE BAYARDO PARRA
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