¿QUÉ ESPERAMOS DEL AÑO NUEVO?

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Análisis Político

Por Abel González Sánchez

Estamos por terminar el inolvidable año 2021, que será recordado por las campañas, las elecciones, la violencia, el coronavirus, y por el inicio del cambio de gobierno estatal y ayuntamientos, parecía no tener fin, ya se definieron quienes gobernarán los próximos años, y cuantos fallecieron lamentablemente por la violencia y también por la pandemia, además ya sabemos quiénes fueron suspendidos injustamente al puro cambio del gobierno estatal y en los municipios, hoy viernes 31 de diciembre termina el 2021, para recibir mañana sábado el año nuevo 2022, pero ¿Que esperamos del año nuevo?.

Despediremos así a un año que culmina e iniciaremos otro nuevo período, una nueva etapa en los dos niveles de gobierno, estatal y en los municipios. Lo que más escucharemos hoy por la noche son buenos deseos: «feliz año nuevo», «buen final, mejor comienzo 2022». Se genera mucha expectativa, se hacen predicciones, se dan consejos, deseos y algunos abrazos inesperados a pesar de la pandemia.

Lo que esperamos del año nuevo por parte del gobierno es sin lugar a dudas una mayor apertura, puertas abiertas, aunque vemos que será al contrario por falta de experiencia de algunos nuevos Secretarios o Subsecretarios, deseamos tener a funcionarios más sensibles y sencillos para resolver la problemática social y económica, nadie sabe lo que va a ocurrir el próximo año 2022, no sabemos que harán los nuevos alcaldes en los ayuntamientos ni que ocurrirá en los próximos seis años con el gobierno estatal que encabeza la ahora gobernadora Indira Vizcaíno Rodríguez; lo único que podemos afirmar sobre el futuro de Colima es que tenemos un panorama incierto, porque dependemos mucho del gobierno federal, y esperamos grandes obras, como la que se comentan ya con el proyecto del tren de pasajeros de Colima a Manzanillo, pero la mayoría nosotros los colimenses de acuerdo a los resultados de las elecciones buscamos un verdadero cambio político, económico y social gubernamental, no solo en el manejo del discurso político, ni en la estrategia de vender solo la esperanza del cambio, pero sin cambiar nada.

EL CAMBIO QUE SÍ FUE INJUSTO

Totalmente injusto, absurdo y con abuso de poder fueron los despidos de muchas madres y padres de familias empleados que dieron de baja sin contemplación alguna, mediante mensajitos en el celular y recaditos, los nuevos jefes no dieron las caras, con funcionarios despóticos y sintiéndose dueños de Colima, varios burócratas fueron despedidos sin considerar su antigüedad por el simple hecho de que deberían ocupar su lugar otros nuevos funcionarios, argumentando que eran basificados por el sexenio anterior y teniendo pocos años, cuando una gran cantidad tenían más de 20 años laborando, y cuando lo correcto y costumbre era de que los reubicaran en sus funciones menores por derecho de que tenían de antigüedad, pues tienen derechos laborales, constitucionales y humanos, sin embargo los suspendieron definitivamente sin explicación alguna y sin respeto, ya no digamos con indemnización, convirtiéndose en un despido injustificado, para ellos y sus familias éste 2021 ya fue terrible e inolvidable, con el cambio de gobierno los eliminó, les fue peor. Lo correcto es indemnizarlos conforme a derecho pues el gobierno hoy está peor que las empresas.

¿Y EL CAMPO DE COLIMA?

Jaime Sotelo Subsecretario de Desarrollo Rural dijo que el tema de la sanidad vegetal será prioridad para aumentar la producción y la calidad del producto en el campo, admitió que sigue trabajando con el gobierno federal en cuestión de recursos pero mientras no haya dinero, solo estamos en la gestión, “son días de trabajo, recorriendo el estado y traduciendo inquietudes para impulsar el año que entra 2022.

Hay una realidad muy cruda, el gobierno federal abandonó prácticamente al campo desde hace muchos años, la población rural y lo agrario no tiene importancia para los presidentes del país en los últimos 30 años, aun cuando cerca de 20 millones de mexicanos son víctimas de la crisis permanente del campo, que se agrava por el paulatino abandono gubernamental.

Hoy en día, la fórmula permanente del gobierno federal y de los gobiernos estatales es impulsar la dadiva social generadora de votos en las urnas y no la acción concertada con los campesinos para fomentar el desarrollo integral de sus comunidades para elevar su nivel de vida. Están quebrados los sistemas de producción, con bajos niveles de competitividad, derivados de la fallida apertura comercial a las importaciones agroalimentarias que abarrotan el mercado interno y desplazan la producción de los campesinos enviándolos a la miseria y marginación social.

Jaime Sotelo y también Arnoldo Vizcaíno padre de la ahora gobernadora Indira Vizcaíno tiene la responsabilidad moral por su experiencia en el agro como líder campesino en apoyar a la nueva política pública para el campo, ya que fue parte del proyecto del cambio, pero Jaime Sotelo necesita incorporar a la Secretaría a líderes visionarios y experimentados sin intereses económicos personales, que sean verdaderos líderes agrarios en apoyo al campo, como lo fueron aquellos que impulsaron el barzón y otras organizaciones campesinas que lucharon hasta lograr más apoyos del gobierno federal, pues hoy la dependencia parece abandonada esperando dádivas del gobierno federal y estatal.

Por último y para despedirnos, el cierre de éste año 2021 y la apertura del siguiente del 2022, que es mañana, es un motivo muy especial para expresarles mis mejores deseos de prosperidad, que tengan mucha paz y armonía con los seres queridos. ¡Feliz Año Nuevo!