En rueda de prensa, el coordinador de la fracción priísta indicó que el ajuste a nómina es “a aquellos compañeros que por circunstancias ya no se les puede pagar y que se tiene que hacer un ajuste en la medida de la relación laboral”, aclaró.
Sostuvo que los empleados de confianza y de base “no fueron tocados” porque ya tienen derechos generados sino a los contratos temporales que ya no se renovaron “y también hay que carácter eventual y también becarios, al que el estado les da un apoyo”, precisó.
“Si los ingresos disminuyen, que es el caso que nos ocupa, nosotros estamos estimulando el pago, pero necesitamos que la gente contribuya más y adonde va el ajuste: no solamente a servicios personales, sino a combustibles, vehículos, telefonía celular, no están autorizadas comidas, todos los ajustes en recibimientos, apoyos para viajes de grupos como a Talpa, que se daban, la gente está incómoda, porque se les daba esos apoyos, ya no se han podido dar, son ajustes reales”, puntualizó.
Aunque no proporcionó cifras, se habla de que 300 empleados temporales ya no se les renovó el contrato y que a más trabajadores se les rebajó el sueldo en un 5%.
Flores Castañeda dejó en claro que en tanto no se logre el equilibrio financiero se van a mantener estas medidas, y aseveró que por parte del congreso del estado revisarán si estas medidas son óptimas y han dado resultados para equilibrar el estado financiero de la administración de Mario Anguiano.