Alex Carbajal Berber|ULTRAMEDIA
Encomendados a San Luis Aragonés
Ha llegado el día de uno de los partidos más esperados -salvo la final de la misma Copa del Mundo-, que es la definición de la Liga de Campeones de Europa. Será un partido intenso, no solamente por la estruendosa rivalidad entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid, sino por la calidad de ambas plantillas y ambos entrenadores.
Lastimosamente para el conjunto colchonero, Diego Costa se perderá (a menos que suceda un milagro) este duelo que puede ser la oportunidad única de su carrera. Este extraordinario futbolista, el cual fue pretendido por varias selecciones nacionales durante el último año, era la puesta de cara rojiblanca ante el vendaval de halagos de los que ha sido objeto Cristiano Ronaldo en la presente temporada.
Carlo Ancelotti, el entrenador merengue, prepara un ataque del que podría estar ausente Karim Benzema, una fisura en su cuadro que podría ser costosa. Sin embargo, el verdadero enemigo de los blancos es la gran presión existente por ganar la décima Copa de Europa, doce años después de que ganaron la novena, y en cuyo lapso su acérrimo rival, el FC Barcelona, creó una época y ganó tres “Orejonas”. En ese mismo lapso, el Madrid fue eliminado siete años consecutivos en los cuartos de final de la Liga de Campeones. Esa es una imagen fiel de la presión existente, tan tangible como el hecho de Ancelotti tiene una guillotina apuntando a su cuello, la cual seguramente caerá sobre él si no levanta el trofeo en Lisboa.
La apuesta del “Cholo” Simeone será la fuerza de su escuadra. El Atleti es un equipo que presiona, pero que también sabe jugar al futbol y que tiene variantes ofensivas a balón detenido. El duelo por las alturas será interesante, donde figura también la torre que es el portero Courtois, una ventaja considerable de los colchoneros, después de que el belga haya suplido a Casillas como mejor portero del mundo.
Ambas escuadras madrileñas han emparejado sus duelos en los últimos tiempos. Hace un par de años, incluso, los derbis entre ambos eran siempre a favor del Real Madrid. Las cosas, con la llegada de Simeone, cambiaron drásticamente. El Atleti se ve cada vez más seguro en este tipo de enfrentamientos, y es por ese motivo que este partido luce tan impredecible, pese a la posible ausencia de Diego Costa.
El Real Madrid llega como favorito por su historia, por su prosapia en este tipo de competencias, pero el Atlético llega como el caballo negro de la temporada que ya blanqueó al Barcelona en la Liga. La oportunidad para los rojiblancos es única. Si son capaces de dejar atrás los fantasmas, ganará con solvencia este duelo. Que se encomienden a San Luis Aragonés.