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México.- Justo a las 7:19 de la mañana de este sábado, aún con las sombras del verano descendiente, en sencilla y conmovedora ceremonia el Presidente Enrique Peña Nieto rindió homenaje a los más de 10 mil mujeres y hombres mexicanos que perdieron la vida en la capital del país hace 30 años en el terremoto del 19 de septiembre de 1985.
Acompañado de los secretarios de Gobernación, Defensa y Marina, Miguel Ángel Osorio Chong, el general Salvador Cienfuegos y el almirante Vidal Francisco Soberón Sanz, así como del comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales y el coordinador nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, el Ejecutivo atestiguó el izamiento de la bandera nacional en la plancha del Zócalo capitalino y la saludó con respeto mientras la Banda de Guerra de la Sedena interpretaba un toque de silencio en honor a los caídos hace tres décadas.
La ceremonia no duró ni 9 minutos y al término de la misma –vestido con traje negro y corbata del mismo color, camisa blanca- Peña Nieto junto a su comitiva caminó por los diversos locales de una megaexposición sobre el desarrollo de la cultura de protección civil que organizara elementos del Ejército, Marina, Policía Federal, Cruz Roja, IMSS, ISSSTE y la Conagua, así como organismos de la sociedad civil como la Brigada Internacional 19 de septiembre, mejor conocida como Los Topos, entre otros.
Ahí, frente a Palacio Nacional, el mandatario saludó y felicitó a los diversos contingentes de las fuerzas castrenses especializados en apoyar a la población frente a desastres naturales, huracanes, temblores y ciclones, y estos le mostraron el equipo precisamente destinado a apoyar a la sociedad ante circunstancias de esta naturaleza.
A las 7:40 de la mañana, exactamente, Peña Nieto y sus colaboradores ingresaron a Palacio Nacional, mientras ondeaba a media asta el lábaro patria. El sol se asomaba en la lejanía para atestiguar lo sucedido… como hace 30 años.
Fuente: Excélsior