El grupo que expuso los avances estuvo conformando por Gabriela Garibay, Mireya Saray Abarca, Bertha Elizabeth Velasco, Karina Alcántar, Rubén González y Basilio Lara.
Hablaron sobre el tema central del trabajo de investigación, el cual consiste en las transiciones educativas de la secundaria al bachillerato y del bachillerato al nivel profesional.
Señalaron que la transición se vincula con situaciones personales, familiares, sociales e institucionales, en la cual los estudiantes recorren un periodo preparatorio para luego continuar con un lapso de adaptación y ajuste a un nuevo contexto.
¿Qué hace que algunas personas se integren, adapten y continúen estudiando?, ¿qué motiva lo contrario, es decir, que abandonen la escuela?, son las preguntas que tratan de resolver en el estudio.
Rubén González, comentó que también pretenden saber cuáles son las características que tienen los jóvenes al entrar a la institución, cómo interaccionan con ésta y qué características hacen que permanezcan o la abandonen, “al saber los motivos de las deserciones, estaríamos en mejores posibilidades, como institución, de atender a los alumnos con el fin de que se queden”, dijo.
Indicó que apenas han incursionado en la primera parte del estudio, donde analizan documentos y aplican cuestionarios a grupos de estudiantes cuando ingresan al bachillerato y a la licenciatura.
Los estudiantes de nivel bachillerato perciben el cambio del nivel: mucho mejores instalaciones que en la secundaria. Asimismo, comentaron que se han hecho más responsables, investigan y aprenden más, tienen mayor comunicación con los profesores.
En la adaptación a este nivel, los estudiantes comentaron que tuvieron que hacer cambios en su actitud, ya que han de seguir reglas para poder adaptarse al sistema del bachillerato.
En el nivel de licenciatura, los estudiantes manifestaron que recibieron oportunamente la orientación vocacional para elegir bien su carrera.