Por: Gerardo Velázquez de León
La Liga MX intenta de todo para posicionarse como una de las mejores del mundo, invierte en esfuerzos ejecutivos para conseguir patrocinadores de élite, incita a sus clubes a mejorar su infraestructura, a tener mejores estadios e instalaciones, los orienta a hacer campañas de mercadotecnia, organiza y financia torneos juveniles e infantiles, pero lo que no puede detener es los cambios de programación de la televisión. Nunca estaré de acuerdo que por un partido final de la NFL se cambie un partido de futbol, es una aberración e ir en contra de sus propios intereses.
Aunque me tomen como un orate, el Guadalajara vs Pachuca es mucho más atractivo para el mexicano común y corriente, para el que va de pie, que el Super Bowl en Arizona, en el que además juegan equipos con nulo arraigo en el país.
Nunca podría imaginar que fuera al revés, que por la final de la Liga MX se cambiara de fecha y horario un partido de la NFL de temporada regular en Estados Unidos. Hace unos días, exactamente el sábado de inicio del torneo estaba en un restaurante para observar el partido América vs León que simultáneamente se encontraba en la parrilla televisiva con el partido de Playoffs entre Nueva Inglaterra vs Baltimore.
En este prestigiado restaurante de San Jerónimo, se le ocurrió al capitán darle gusto a tres comensales que querían ver la NFL. Cuando al minuto cinco, ya con la victoria de 1-0 parcial del América, se le ocurrió cambiarle de canal, la respuesta fue inmediata, reclamos y reclamos de la mayoría, es decir, a muy pocos les interesaba ver el futbol americano y lo manifestaron de manera inmediata con abucheos, gritos y solicitando la cuenta para irse de inmediato.
La mayoría de los comensales exigieron que volvieran a sintonizar el juego en el Estadio Azteca, lo cual tuvieron que hacer para evitar un problema mayor. Incluso los aficionados al futbol americano lo entendieron y tuvieron que adaptarse a la situación.
Como éste, se han presentado muchos ejemplos en el que a pesar de que se trate de las Finales de la NFL, de la NBA o MLB, siempre se impondrán partidos de futbol, sobre todo en los que haya en medio aficiones como la de Guadalajara y Monterrey. El futbol en México es un estilo de vida, y la Liga MX es lo nuestro y aunque no sea de un excelso nivel, la pasión e interés siempre existirá por encima de cualquier otro deporte o Liga, porque además la televisión abierta sigue mandando en captación de las grandes audiencias.
Hasta pareciera una situación de sentido común, se trata del equipo más popular del país que además del interés nato de sus aficionados, vive tal momento de incertidumbre por su lucha por no descender que nos lleva a ver partidos muy atractivos, peleados y llenos de nervio. Además, a Chivas le hubiera caído mejor tener un día más de preparación para este cotejo y seguir su calendario habitual.
Ahora que la Liga MX se ha encargado de difundir la asistencia a los estadios durante las tres primeras jornadas del Clausura 2015 y ser los encargados en designar los horarios, claro con la aceptación de las televisoras quienes pagan una gran cantidad de dólares por los derechos de transmisión. ¿De que sirve pagar tanto dinero si en vez de empalmarse con la NFL prefieren que tres partidos de la Jornada 4 de la Liga MX sí lo hagan? Guadalajara vs Pachuca, Monterrey vs Veracruz y el primer tiempo del León vs Jaguares estarán al mismo tiempo, todo por… ¿el Super Bowl?
Deslumbrarse de tal forma por un evento que en la mayoría de las ocasiones es más entretenido el medio tiempo y que además será transmitido por cuatro diferentes cadenas de televisión. El año pasado sucedió lo mismo, Chivas vs Cruz Azul lo movieron al sábado, en vez de la tradición de programarlo en domingo en la tarde.
El Super Bowl es entretenido, exitoso y mueve a muchas personas, pero nunca a la gran población del país, además es quitarle valor a la Liga MX, hacerla menos en relación a un deporte que sí es atractivo, pero nunca será el deporte nacional. Defender a la industria del futbol debería ser un tema primordial para todos los involucrados y no dejarse apantallar por Katy Perry.