Por: Jonás Larios Deniz*
Para casi todas las personas, son claros los beneficios que aportan la tecnologías de la información y la comunicación en los diferentes ámbitos de lo cotidiano: en la salud, en el comercio, en la seguridad, en el entretenimiento, etc. En la educación, por ejemplo, los dispositivos móviles constituyen una oportunidad para hacer posible la incorporación de un mayor número de usuarios a herramientas electrónicas y/o aplicaciones para el aprendizaje de idiomas, perfeccionamiento de la ortografía, traductor de idiomas, etc. No obstante, cuando tales dispositivos móviles con sus muchas aplicaciones están en manos de una niña, niño o adolescente, la conexión a internet significa el destape de la caja de Pandora.
De acuerdo con la mitología griega, la caja de Pandora es “un engañoso mal, bajo la apariencia de un bien, creado por Zeus. Pandora es una virgen dotada de nefastos obsequios de los inmortales para los mortales. Cuando llega a la Tierra, todos se pasman ante su figura incomparable. Ella se dirigió hacia Epimeteo, el ingenuo hermano de Prometeo, llevándole la caja regalo de Zeus. En vano aquél había advertido a su hermano que nunca aceptase un obsequio venido de Zeus. Para no ocasionar con ello un daño a los hombres, debía de rechazarlo inmediatamente. Epimeteo, olvidándose de aquellas palabras, acogió gozoso a la hermosa doncella y no se dio cuenta del mal hasta que ya los tuvo. Hasta entonces las familias de los hombres, aconsejadas por su hermano, habían vivido libres del mal, no sujetos a un trabajo gravoso, y exentos de la torturante enfermedad. Pero la mujer llevaba en las manos su regalo, una gran caja provista de una tapadera. Apenas llegada junto a Epimeteo abrió la tapa y en seguida volaron del recipiente innumerables males que se desparramaron por la Tierra con la velocidad del rayo. Oculto en el fondo de la caja había un único bien: la esperanza; pero, siguiendo el consejo del Padre de los dioses, Pandora dejó caer la cubierta antes de que aquella pudiera echar a volar, encerrándola para siempre en el arca” (http://www.erroreshistoricos.com/curiosidades-historicas/origen/635-la-caja-de-pandora-historia-y-significado.html).
La analogía de la caja de Pandora con los dispositivos móviles conectados a internet pretende resaltar la gran cantidad de información que los adultos no podrán administrar y que en manos de infantes y adolescentes les traerán graves consecuencias a sus formas de pensamiento y comportamiento. Pandora, como la tecnología, es bella; sin embargo, la tecnología a diferencia de Pandora, es además interactiva, creativa, colaborativa, interconectada, instantánea y multimedia. Lo vemos en los salones de clase: los estudiantes están conectados a Facebook, Twitter, Instagram, etc. y establecen comunicación con personas conocidas y desconocidas a través de chats aparentemente para chicos de su edad. Como maestro les digo a las madres y padres de familia que sus hijas e hijos no necesitan un teléfono con conexión a internet. Sepan, sean conscientes que sus hijas e hijos tienen contacto a muchos males cuando abren sus teléfonos celulares con conexión a internet. Recojan a sus hijos e hijas los teléfonos celulares y tabletas electrónicas con conexión a internet. ¿Son premios? Sugiero premiar con fruta, raspados, tejuinos, obleas con miel, mangos con sal y limón, aguas frescas de jamaica, visitas a parques y jardínes. Atendiendo al mito de la caja de Pandora, algo bueno queda (está en el fondo de la caja) y la podemos recuperar para salvar a sus hijas e hijos, a nuestras alumnas y alumnos: es la esperanza. Por último, para evitar confusiones respecto del otorgamiento de computadoras y tabletas por el Gobierno Federal en el marco del programa México Digital: tanto las computadoras portátiles como las tabletas deben ser usadas por todos los miembros de la familia, lo anterior se explica detalladamente en el portal primariatic.sep.gob.mx.
*Profesor-investigador de la Universidad de Colima