AL DESNUDO
Por: Edgar Rodríguez.
Han observado en su comportamiento Julio Ignacio Martínez De la Rosa y Luis Manuel Cárdenas Martínez como funcionarios del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el estado de Colima, Dependencia del Gobierno Federal de la Cuarta Transformación, únicos que vieron en la capilla del ex Colegio de las Madres Adoratrices que colapsó por el embate del temblor de enero de 2013, una joya arquitectónica de gran valor histórico, artístico y cultural, dizque porque tenía unos arcos como los de los acueductos coloniales de Querétaro y Morelia, y vitrales más hermosos que los de puebla.
El empecinamiento conservacionista de estructuras constructivas viejas, de Martínez De La Rosa y Cárdenas Martínez, tiene a los vecinos del triángulo templario Sagrado Corazón-El Refugio-La Sangre de Cristo, más que indignados, pues llevan ya 18 años padeciendo el perjuicio de las ratas de dos y cuatro patas que tienen en los escombros del predio de 5 mil 200 metros cuadrados su guarida donde le queman la cola al diablo para armarse de valor y salir a delinquir, a asesinar ancianos y a robar en automóviles estacionados en la vía públicas, casas habitación y negocios establecidos.
Cuando hace unos días los vecinos del ex colegio vieron que trabajadores, maquinaria y equipo de demolición procedían al retiro de los escombros, se alegraron porque al fin les despejarían su entorno dejando limpio el terreno para el futuro levantamiento de algún proyecto constructivo, pero pronto el gozo se les fue al pozo, pues los burócratas del INAH mencionados en el primer párrafo pararon en seco la operación echando mano de la fuerza pública, incluida la Guardia Nacional, intervención ordenada por la Fiscalía General de la República a petición de ellos.
Martínez de la Rosa y Cárdenas Martínez, respaldados por las armas, levantaron como trofeos a dos operadores de maquinaria pesada y dos equipos de este tipo. Los primeros ya fueron liberados por los abogados de los empresarios afectados, aunque siguen sujetos a proceso, pero las máquinas continúan aseguradas por la autoridad judicial. Deben sentirse orgullosos y satisfechos por los estropicios que ambos han causado.
Los burócratas de la antropología y la historia han prestado oídos sordos a las voces que juzgan discordantes, del Ayuntamiento de Colima, de los empresarios, de los vecinos y de los articulistas, que han denunciado sus abusos y atropellos. En un último intento de hacerlos entrar en razón, los vecinos se reunión la tarde del jueves 26 de agosto de 2021 con el alcalde de Colima, Leoncio Alfonso Morán Sánchez, quien se comprometió con ellos a entregarle personalmente en persona, un documento al INAH con el posicionamiento del Ayuntamiento de Colima, mismo que es diametralmente opuesto al que han adoptado los multicitados Julio Ignacio Martínez De la Rosa y Luis Manuel Cárdenas Martínez.
Como a la administración municipal saliente le quedan tan sólo mes y medio de vida, y a la estatal dos meses, serán las que encabezarán Margarita Moreno González e Indira Vizcaíno Silban, respectivamente, quienes le den una solución definitiva al problema vecinal que han creado los defensores de bardas viejas y cachivaches. En tanto, inversionistas y vecinos deberán esperar con serenidad y paciencia.
Se dice que…
*La Secretaria de Cultura del Gobierno Federal 4tésita, Alejandra Frausto Guerrero; y el Director General del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, se han tardado en meter en cintura a sus representantes en el estado que tienen frenado el rescate de importantes zonas de los cascos viejos de las ciudades de Colima, so pretexto de preservar construcciones cuyo valor apenas llega al sentimental.
*Luis Manuel Cárdenas Martínez se ostenta como “Integrante del Comité de Vigilancia de la Sociedad Defensora del Tesoro Artístico de México Capitulo Colima; y Arquitecto Dictaminador en la Sección de Monumentos Históricos del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Centro INAH Colima”, blasones que avalan las drásticas recomendaciones que le hace a su jefe inmediato.
*Cuando Julio Ignacio Martínez De La Rosa fue presentado como delegado del INAH en Colima su jefe Prieto Hernández, éste destacó la vinculación de aquel con los medios de comunicación, “toda vez que mantiene una columna semanal en un medio local, lo que resultará clave para una institución y una oficina que requiere una mayor cercanía con la población, lo que a su vez tiene que ver con comunicar más y mejor”. ¡No pos’ sí, se ve, se siente ¡
Como el sábado anterior llovió, la directora del Instituto Colimense del Deporte, Ciria Salazar, el domingo que tuvo una mañana fresca y después soleada, cerró el acceso a los caminantes a su Parque Ecológico La Campana donde nomás sus chicharrones truenan.