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México.- Joaquín “El Chapo Guzmán” se sometió ante un interrogatorio ante un fiscal en el penal federal de Puente Grande, el cual parecía más su casa que el lugar donde estaba cumpliendo su condena.
José Antonio Ortega, fiscal criminal, narró el día cuando se entrevistó con Guzmán Loera en marzo de 2000, diez meses antes de la primera fuga del capo sinaloense.
El fiscal narró a CNN que la cita era a las 10:00h, pero tuvo que esperar por doce horas hasta que Guzmán Loera “estuviera listo” para recibirlo, después de una visita conyugal y haber tomado una siesta.
Cuando la hora llegó, el Chapo Guzmán invitó al fiscal Ortega a sentarse y a los policías que lo acompañaban les pidió un poco de café.
“El Chapo era dueño de la cárcel para ese momento. Parecía como si hubiera sido invitado a su casa. Nos ofreció café, sabiendo perfectamente que el interrogatorio duraría muchas horas”.
Lo más extraño de todo fue que el interrogatorio no se llevó a cabo en un cuarto especial para ese propósito, sino en una oficina a un costado de la del director del penal federal.
El interrogatorio empezó y la primer pregunta fue porqué del retraso de la cita.
“Mire, tuve mi visita conyugal hoy. Después me fui al sauna y luego tomé una siesta, para que pudiera recibirlo como se merece”, contestó.
Guzmán Loera escapó del penal federal de Puente Grande el 19 de enero de 2001 y fue detenido hasta el 22 de febrero de 2014 en Mazatlán. Una segunda fuga ocurrió el 11 de julio de 2014 ahora del penal federal del Altiplano, donde ahora está recluso tras su reaprehensión del 8 de enero pasado.
Fuente: http://lopezdoriga.com/