Mulet ha explicado este mediodía que la exploración quirúrgica que se le practicó anoche al torero en el Hospital Quirón Sagrado Corazón de Sevilla confirmó que sufría un sangrado “muscular” que “gracias a Dios” no estaba relacionado con la lesión vascular causada por la cornada que sufrió el pasado viernes cuya corrección permanece “estable y en buenas condiciones”.
El parte médico emitido ha confirmado que “el control hemostático” del sangrado muscular evoluciona “de forma satisfactoria” y que El Juli se encuentra “hemodinámicamente estable”.
Los médicos no han determinado aún el tiempo estimado de recuperación. El torero Julián López experimentó anoche un empeoramiento por la grave cornada que sufrió en la plaza de toros de La Maestranza. El Juli, que en la mañana del sábado había pasado a una habitación de planta, con una aparentemente buena evolución de la primera operación, comenzó a sufrir fuertes dolores a lo largo de la tarde. La pierna derecha afectada por el percance no tenía buen aspecto y presentaba una notable inflamación en la zona del cuádriceps, por lo que los doctores consideraron oportuno volver a llevarle al quirófano, donde comenzó a ser intervenido de urgencia a las 21.30.
Según el parte médico firmado entonces por el doctor Mulet, la exploración realizada al torero “objetivó el origen del sangrado a nivel de la herida muscular, procediéndose al control homeostático del mismo de forma satisfactoria”.
Roberto Domínguez, apoderado de El Juli, informó ayer que durante la intervención, que se alargó por espacio de dos horas, se le transfundieron al diestro madrileño tres unidades de sangre. Los médicos no han determinado aún el tiempo estimado de recuperación.
‘El Juli’ resultó herido el viernes por el primer toro de la corrida de toros de la Feria de Abril de Sevilla, que le infirió una cornada de 15 centímetros en la zona del cuádriceps de la pierna derecha que le provocó importantes destrozos musculares además de romperle la vena safena.
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