Luis Rosales Chávez|COLIMANOTICIAS
Tecomán, Col.- Es momento de que los productores de Tecomán regresen sus ojos al cultivo del coco, que si bien representa una inversión a largo plazo, también es un cultivo noble que da cosecha hasta a tres generaciones; afirmó el productor Inocencio Espinoza Hernández.
En entrevista dijo que el coco es una buena opción para la agricultura en Tecomán, desafortunadamente, los productores están desorganizados y es un cultivo que necesita de aproximadamente cinco años para empezar a recuperar esa inversión. Aunado a ello, aseveró que la plaga del picudo negro o también conocido como el mayate prieto, puede llegar a matar hasta el 50% de las palmas que se siembran.
“Lo triste es que te las mata cuando están empezando a producir, las cuidas cuatro años y cuando vas a empezar a cosechar se empiezan a morir”.
No obstante, señaló que hay demanda por los cocos, “sí hay interés, de hecho están trayendo producto de Guerrero y Michoacán para poder surtir los pedidos que se tienen para exportación, lo necesario es el apoyo, la organización para aguantar esos cinco años que hay que mantener el cultivo”.
La exportación de coco se da principalmente a Estados Unidos en coco fruta aunque también se industrializa una parte como coco rallado, aceite destilado y centrifugado, “ahí está la opción en Tecomán, fuimos un municipio de importante producción, de hecho el Estado de Colima es el que tiene el mayor rendimiento a nivel nacional, desafortunadamente los palmares son viejos, hay poco palmar nuevo que esté supliendo los palmares que se están tumbando”.
Explicó que si bien el periodo de espera se puede bajar a tres años para ello es necesario tecnificar el sistema de riego, “esas inversiones son difíciles considerando lo golpeado que quedamos del HLB, y los créditos en el banco son difíciles de conseguir, es una planeación lo que se tiene que hacer, empezar con superficies pequeñas y mantenerte con otras superficies de limones u otro producto que te den ingresos cada semana”.
Como dato adicional mencionó que los palmares actuales en Tecomán fueron en gran parte sembrados por los abuelos “ellos los cosecharon, mi padre los cosechó y yo todavía estoy cosechando; es un cultivo noble, es momento de volver a invertir en plantaciones nuevas, cuando vienen los huracanes es el que más soporta las tempestades pero también es una inversión a largo plazo y no son muchos los que se animan”.