¿Cómo saber si estás quemando calorías o solamente estás sudando?

0

COLIMANOTICIAS

México.- Acabas de terminar un maratón debajo del sol horrible, sientes que podrías exprimir tu playera de tanto sudor. Si sudaste tanto, eso quiere decir que quemaste un montón de calorías, ¿cierto? No necesariamente.

En realidad, este sudor podría ser el resultado de muchas cosas: tu edad, tu género, tu condición física, el número de glándulas sudoríparas que tienes en el cuerpo, tu ADN, o tu temperatura. Tu sudor no es un indicador de qué tanto estás trabajando y cuántas calorías estás quemando.

  1. Escucha a tu estómago: Si después de hacer ejercicio, ruge tu estómago, es porque algo estás haciendo bien. Inmediatamente o después de una rutina de ejercicio, tu cuerpo te pedirá nutrientes. Y está bien tener hambre, quiere decir que tu cuerpo ha trabajado duro y necesita refill de energía.
  2. La forma perfecta: Entre más músculo tengas, más eficiente será tu metabolismo, durante o después del ejercicio. Y ejecutar una rutina de ejercicio para fortalecer el músculo no siempre resulta en mucho sudor, pero eso no quiere decir que no estés quemando suficientes calorías.
  3. Pon atención a tu ritmo cardíaco: Técnicamente no puedes colocar un aparato para llevar un registro constante de tu ritmo cardíaco, pero los entrenamientos a intervalos (HIIT), son perfectos para acelerar el metabolismo e incrementar el consumo de ejercicio, ambas características importantes para quemar el doble de calorías.
  4. Asegúrate del después: Es importante que pongas atención a cómo te sientes después de un entrenamiento, pero también durante la sesión. Si estás sudando un montón en tu clase de spinning, pero tus músculos no se sienten cansados, podría ser que no estás quemando las suficientes calorías. Y esto no quiere decir que deberías sentirte adolorida por días, pero tus músculos sí deben sentirse diferentes.
  5. Cámbiale: La mejor forma de acelerar el metabolismo y quemar calorías es no hacer lo mismo todos los días. O bueno, si no tienes de otra, al menos varíale a los tiempos, o al esfuerzo. Porque, aunque no lo creas, el cuerpo se acostumbra y deja de hacer el mismo esfuerzo después de un par de días, así que es importante que siempre siga haciendo más, y más, y más, y más.

Fuente: Eme de Mujer