Rangel Lozano hizo énfasis en el respeto manifestado a través de cantos, poemas, representaciones escénicas y lectura de calaveras a manera de tributo para quienes se han adelantado en el camino de la vida, por lo que felicitó a los organizadores y participantes.
Refirió que estas fechas y celebraciones sirven para reflexionar sobre el sentido de la vida y conminó a los presentes a hacer el bien para que sean recordados como hombres y mujeres que dieron un gran ejemplo a sus familias y a la sociedad colimense.
Por su parte, la Presidenta del Voluntariado de la Secretaría de Educación agradeció la participación activa de las personas que acudieron a la celebración porque se convierten en un ejemplo para la comunidad en el rescate de las tradiciones.
Destacó el invaluable respaldo y confianza que ha depositado en el Voluntariado la presidenta del DIF Estatal, Alma Delia Arreola de Anguiano, quien estuvo representada en esta ocasión por Julia Jahel Pérez Quiñones, Secretaria ejecutiva del Voluntariado.
En representación del DIF Estatal, Pérez Quiñones destacó el entusiasmo que imprimen los integrantes de los CEDECO que dirige Leticia Contreras de Rangel, no sólo en esta manifestación artística, sino en todas las actividades que desempeñan a lo largo del año en estos Centros.
Alrededor de los tzompantlis que instalaron los integrantes del Voluntariado de la Secretaría de Educación y los maestros en cada uno de los CEDECO, se colocaba el grupo de música autóctona de la tercera edad “Huehuetlatolli” que dirige el maestro Jorge Romero para iniciar el ritual entre cantos y flores y dar paso a las presentaciones artísticas, finalizando con la entrega del pan de muerto y chocolate en agua, en apego a la tradición mexicana.