Como resultado de esta reunión y porque se considera que la presencia de los cocodrilos podría ahuyentar al turismo y constituyen un peligro para los ciudadanos manzanillenses que visitarán las playas durante el periodo de vacaciones de invierno, se consideró necesario la intervención de una autoridad municipal que diera respuesta rápida a cualquier reporte de avistamiento, recayendo la responsabilidad inicial en Protección Civil Municipal.
Por lo que se procedió a diseñar un protocolo para atrapar los cocodrilos fuera de su hábitat y trasladarlos a los cuerpos lagunares próximos, mismo que se envió a la Dirección General de Vida Silvestre de la SEMARNAT.
“El 8 diciembre de 2011, recibimos el oficio de autorización, dirigido a la Unidad de Protección Civil de Manzanillo, con vigencia de un año, mediante el cual la Dirección General de Vida Silvestre, autoriza a Protección Civil para que auxiliados con personal técnico capacitado que los hoteleros han definido, realicen la actividad y las Delegaciones Federales de PROFEPA y SEMARNAT, habrán de constatar la ejecución cabal de la actividad para evitar sufrimiento innecesario a los ejemplares capturados”, mencionó el delegado Raúl Arredondo Nava.
El Delegado Federal concluyó asegurando que se tendrá un seguimiento puntual de la referida actividad para que los colimenses disfruten de las playas seguros y que en todo momento se atenderá de inmediato cualquier reporte de avistamiento de cocodrilos, para proceder en consecuencia.