De inicio comentó que se está buscando tolerancia del limón mexicano al HLB, es decir plantas resistentes que sean capaces de soportar la enfermedad, además otra de las líneas de investigación es para convivir con la enfermedad, según explicó, se trata de buscar la forma de intensificar las densidad de plantación con un rendimiento aceptable que le rinda y genere empleos.
Vizcaíno Vargas afirmó que la última línea de investigación es donde se tienen más avances, pues trata de controlar el vector que transmite la bacteria, un animalito llamado Diaphorina, “es en eso donde todos están trabajando en equipo con el estado, con el Cesavecol, Universidad de Colima y otras instituciones donde por supuesto forma parte el Consejo Estatal de Productores de Limón”.
Según explicó el investigador, se tienen avances en el control a la diaphorina desde hace varias años “desde el 2006, porque por sí sola es plaga para el limón y la fundación produce nos ha apoyado en proyectos orientados a eso, de ahí la existencia de una tecnología para combatirla que es lo que se está aplicando”.
Vale la pena destacar la existencia de árboles enfermos cuarentenados, a los cuáles, dijo Vizcaíno Vargas refirió que se tienen aislados para que no transmitan la enfermedad, pero también se estudian, y están aportando datos útiles.