ADULANDO AL FUTBOL

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EL JUNIOR DEL “VOCHO” CLÁSICO… Por: Jorge Martínez

Increíblemente los argumentos padres de los pretextos, hijos de los subterfugios, hermanos de las justificaciones, tías de las evasivas y cómplices de las excusas, siguen fluyendo a manera de cascada a pesar de los descalabros permanentes del conjunto americanista.

Las redes sociales se atiborran de voces silenciosas que encuentran el escaparate perfecto y único sobre todo, para manifestar su malestar, desazón, inquietud, desasosiego, indisposición, intranquilidad, molestia y pesadumbre en contra del técnico americanista.

Y cómo no, si el acabose llegó a Coapa después de no haber podido ganar en casa ni siquiera al último lugar de la competencia –Veracruz-; es como cuando los padres le dicen a los hijos: “estudiar es la única responsabilidad que tienes, deja de flojear y entrégame buenas notas”… no hay que olvidar que América fue el único de dieciocho equipos que arrancó el Clausura 2014 con la encomienda de un solo torneo. Todos sin excepción tuvieron y siguen teniendo en sus respectivos casos, actividad de Copa Mx, Concachampions y Copa Libertadores.

Imaginé por un momento que vendría una renuncia voluntaria o un ultimátum severo y definitivo por parte de los directivos sobre el estratega, o bien, por parte de Emilio Azcárraga sobre los dirigentes y el timonel; y en verdad es inconcebible, inadmisible e inexcusable se sigan curando en salud sin que se les note un miligramo de vergüenza en sus declaraciones.

¿Quién permite tanta equivocación, error, desacierto, inexactitud, imprecisión y sobre todo, tanto desliz, dislate y disparate?… Los jugadores no saben dar un pase a tres metros, pegarle a portería, controlar el esférico, alzar la cabeza al momento de conducir el balón y centrar. Mohamed sigue experimentando al momento de cambiar de posiciones a los jugadores, deja en la banca a los “titulares”, modifica tardíamente y encima hace cambios incorrectos; Eso sin contar que “se está llevando, si no es que ya se llevó entre las patas” a los que hasta hace poco eran la base de la Selección Nacional. Y en ese orden de ideas, considero que el único seleccionable en estos momentos para el Tricolor se llama, Paul Nicolás Aguilar Rojas.

Entendemos a la perfección de la insolvencia que existe en la banca del argentino, pero también sabemos de su negligencia al momento de armar al conjunto y ahora es víctima y victimario de sus propios yerros; América por donde lo miremos es un equipo bastante limitado a pesar que no ha pasado un año cuando se corono campeón con la misma base de jugadores… ¡increíblemente!
Mohamed fue contratado para seguir la línea evolutiva que había dejado Miguel Herrera (aunque duela) y en ese sentido se mueve la crítica constante. Dice la biblia americanista: “jamás dependerás del resultado de los rivales para beneficiarte, eso dejarlo para los clubes de bajo perfil”. Mohamed sobrevive gracias al pésimo inicio de torneo de Tigres, León, Monarcas, Santos y Chivas principalmente. No debiera estar tranquilo un técnico americanista, cuando a leguas se nota que no es gracias a su trabajo el mantenerse en zona de clasificación.

Se dice que es posible perder con buenos jugadores, pero es más difícil ganar sin ellos, por lo tanto quedan dos alternativas, formarlos y saberlos comprar. América es para tener a los mejores y al mismo tiempo formar a los que quieren ser los mejores. Mohamed ni supo elegir a los refuerzos ni ha sabido formarlos y peor aún, los que funcionaban han dejado de servir.

Parte de las responsabilidades de cualquier estratega que llegue a dirigir a los azulcrema, será la de detectar y formar jugadores, sacarles provecho de sus cualidades que estarán determinadas por la conducta que adopte el timonel sobre ellos, pues si logra influir en forma positiva habrá resultados positivos y viceversa.

Mohamed se muestra sin personalidad en el banquillo, no es el mismo que gritaba en Tijuana y el que vivía con demencia los partidos. Con América se nota vacío, chato, conforme, parece no sentir orgullo y respeto por la playera y la institución. No transmite entusiasmo, denota en algunos momentos arrogancia y hasta de peso ha bajado, la presión de la olla se nota. Me queda claro que existe camaradería y compadrazgo entre “Tony” y la actual dirigencia. Si no fuera así, sospecho ya lo hubieran echado. ¡Bueno! hasta los que no tienen vela en el entierro ya rezongaron, como es el caso del ex técnico americanista Manolo Lapuente (Campeón Verano 2002), quien un día antes del partido contra los escualos declaraba: “por mucho menos de esto, ya me hubieran corrido”.

En fin, ya para terminar me gustaría despedirme con un par de preguntas para el Junior: ¿Será realmente muy complicado manejar un “Vocho”?, ¿Se tiene todos los días la oportunidad de poseer un Clásico de tanto valor?

Sin que nos gane el sentimiento, hasta la próxima A.A.G