Opinó que primero “debería arrancarse con obras pluviales y que las demás obras se pasen al año siguiente o cuando haya recurso, pero los distribuidores viales no es una obra urgente, no es una obra que los colimenses si ahorita no nos la hacen nos vamos a morir y en cambio si no hacen los colectores pluviales en el siguiente ciclón nos van a suceder daños peores y las inversiones que están haciendo en vialidades en tercer anillos periféricos de nada van a servir, es dinero tirado a la basura”.
Agregó que “se siguen construyendo vialidades, autorizando fraccionamientos y discutiendo puentes de vialidad, pero los temas de colectores pluviales están rebasados y eso sí está en el Plan de Desarrollo del gobernador y dijo que ése era el plan rector que obra que no estuviera no se iba a ejecutar y los pasos a desnivel no están en el plan de desarrollo y es fundamental que se retome tener colectores”.
Al ser cuestionado sobre que no es fácil destinar el presupuesto de los pasos a desnivel a obras distintas, refirió que en este caso sí sería viable porque se trata de una emergencia e incluso se contó con la visita del presidente Felipe Calderón.
“Es una emergencia la que se vivió y algo se tiene que hace para prevenir futuros daños y eso es fundamental”.
“Creo que hoy se ocupa carácter por parte del gobernador del estado, carácter de las delegaciones federales involucradas y carácter de las diputadas y diputados de todos los partidos para hacer un reclamo fundamental de replanteamiento de recursos de esas obras para obras fundamentales”.
OBRAS DE MALA CALIDAD
Asimismo, el dirigente perredista sostuvo que deben fiscalizarse las obras públicas de reciente creación que se vieron afectadas con el huracán y sancionar “no solamente a los constructores, sino a quienes las asignaron y las supervisaron”.
“Tenemos obras que no tenían ni meses de ser inauguradas y ya vimos la calidad con que fueron construidas”.
“En la carretera a Colima, en el tramo de La Salada tenía 7 derrumbes que cubrían todo, incuso dañaron la carpeta asfáltica e incluso los tramos donde pusieron malla para detener deslaves, más fue el tiempo que se tardó la empresa porque de todos modos le valió”.
“Esta agua vino a relucir la corrupción que hay en la asignación de obra y en la mala construcción”.
Subrayó que “el tercer anillo fue un fraude para los colimenses, está dañado y generando caos vial; además, la obra de Altozano un tramo está cerrado y en un tramo fueron socavadas las huellas de rodamiento”.
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