50 niñas y 50 niños 

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Por: Jonás Larios Deniz*

El pasado domingo 28 de junio se llevó a cabo la aplicación de exámenes a las niñas y niños preseleccionados para ingresar a la Secundaria Estatal No. 12, mejor conocida como “Secundaria de Talentos”. El proyecto educativo para alumnas y alumnos sobresalientes se encuentra ya en su sexto año de actividades; en 2015 egresará la cuarta generación e ingresará la séptima. La generación  2009  de niñas y niños que marcaron el arranque de los trabajos de la “Secundaria de Talentos” están por iniciar sus carreras profesionales, la mayoría en instituciones de educación superior públicas del país, del estado de Colima, una minoría en el Tecnológico de Monterrey y al menos dos de ellos en instituciones del extranjero. En mi opinión, la importancia de esta escuela secundaria radica en cinco aspectos: 1. Es un proyecto educativo colimense, 2. Está dirigido a las alumnas y alumnos sobresalientes que egresan de escuelas primarias públicas, 3. Es un semillero de colimenses con responsabilidad social, 4. Es la cristalización de una propuesta de educación especial para estudiantes con aptitudes sobresalientes y 5. Propone un modelo formativo que educa para la vida. Los tres primeros rasgos hacen que el estado de Colima se perfile como un estado educador, que provee servicios educativos de calidad a una población históricamente marginada: las niñas y niños con algún nivel de sobredotación intelectual. Asimismo, es una propuesta que se sustenta en la equidad de género y  atiende a la necesidad de justicia social, tan necesaria para lograr la credibilidad en el trabajo de las instituciones gubernamentales. Es claro que la mayoría de estudiantes que acuden a esta escuela secundaria no podrían acceder, por sus propios medios, a las actividades extracurriculares que allí se imparten: un tercer idioma (alemán, francés o chino mandarín), artes (danza folklórica y contemporánea, violín, guitarra, piano, canto, teatro y artes visuales) y deportes (karate, futbol. Basketbol, volibol y ajedrez). De acuerdo con un estudio de evaluación intermedia (Larios, 2011), el 54% de las familias tiene un salario igual o menor a mil quinientos pesos a la semana; de estos, un 8.3% (once familias) sobreviven con quinientos pesos a la semana. La pregunta más frecuente que hacen las madres y padres de familia es ¿Qué sigue después de la “Secundaria de Talentos”? La respuesta es poco alentadora, pues depende de la visión (amplia o no) de las autoridades estatales, así como de la participación activa de las instituciones de educación media superior y superior en el estado y en el país. También depende, de la claridad que las madres y padres de familia tengan de los talentos desarrollados por sus hijos; para promoverlos y catapultarlos. No obstante, el gran reto es la continuidad del proyecto “Secundaria de Talentos”, en dos sentidos: a) la permanencia del plantel Villa de Álvarez y b) la creación de tres planteles más, en Manzanillo, Tecomán y Colima. La desgracia para quienes acuden este concurso anual es que solo hay cien lugares: cincuenta para niñas y cincuenta para niños. La posibilidad de lograr este sueño reside en la toma de decisiones del Gobernador en turno, o tal vez, queda en mano de sus asesoras y asesores, concretamente en el nivel de conocimiento que estos tengan de la importancia de la educación especial para la construcción de un país con humanistas y científicas y científicos sobresalientes. Particularmente me preocupa la opinión del encargado de finanzas del gobierno estatal: ¿Su formación universitaria le alcanzará para entender la magnitud y trascendencia de un proyecto como la “Secundaria de Talentos”? ¿Soñará con planteles de alumnas y alumnos sobresalientes para Manzanillo, Tecomán y Colima? ¿Encontrará en la reducción de presupuestos de éste (y otros proyectos estatales) la solución a los problemas económicos que se avecinan? Mientras el futuro llega, en el plantel Villa de Álvarez de la Secundaria de Talentos únicamente serán aceptados 50 niñas y 50 niños. El resto, 242 (según se informó en las pláticas informativas a madres y padres de familia), estarán fuera del modelo de desarrollo de talentos específicos. Ojalá el Gobernador de Colima entrante apueste por la educación, ojalá también que sus asesoras, asesores y encargado de las finanzas estatales sean sensibles y tengan conocimiento de la naturaleza del agrupamiento y el enriquecimiento curricular como estrategias determinantes en la formación de alumnas y alumnos sobresalientes. Señoras y señores del gabinete entrante, ustedes tienen la palabra.

* Profesor-investigador de la Universidad de Colima