TONALTEPETL

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Por: Gustavo L. Solórzano

El secreto de la paz está en el respeto de los derechos humanos.-Juan Pablo II.

Con menos tres aspirantes continua la carrera por la presidencia de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en nuestro estado. Los interesados, incluyendo al actual titular, mujeres y hombres hacen su trabajo de proselitismo y buscan la manera de dar a conocer no solo sus sanas aspiraciones, sino también parte de lo que representa su plan de trabajo. Lo he señalado anteriormente, son profesionistas que buscan servir a Colima y que seguramente están  conscientes de que aunque el triunfo no se ganará en los medios ni con la sociedad, si buscan posesionarse dándose a conocer.

Naturalmente en todo proceso selectivo y en donde está de por medio un presupuesto, surgen también diversas formas para que los suspirantes lleguen, mi abuela decía que “el que tiene más saliva come más pinole”. Lo sano, lo ideal y lo justo, ya no digamos lo legal, es que todos los que anhelan llegar a una responsabilidad lo hagan en igualdad de condiciones cuando de concursar se trata. Así se pierde agusto, o lo que es lo mismo, perdiendo también se gana. Pues  cuando el juego es limpio, hasta dan ganas de abrazar al triunfador.

El problema surge cuando existen dados cargados, como se dice coloquialmente, esto es, cuando alguna candidata o candidato trae ventaja de poder, sobre los demás. Cuando algún padrino o las posibilidades del sistema en favor de tal o cual candidato, lo posicionan ventajosamente sobre los demás, merced a preferencias y bajo el poder de  las influencias. Hoy los diputados y diputadas de nuestro Congreso, tienen en sus manos la maravillosa oportunidad de hacer valer el cambio que los llevó a ellos mismos al cumplimiento de la responsabilidad que ostentan. Cualquiera que sea la persona que represente los derechos humanos de los ciudadanos colimenses, es obligadamente necesario que sea bajo el escrutinio limpio y transparente  de la honorabilidad.

Sería muy lamentable caer en el pecado de  la imposición, como ya se rumora. Pues no solo daría al trasto con lo que se ha logrado hasta hoy en esa materia,  sino que se estaría desacreditando el prestigio e institucionalidad de uno de los poderes que promueven la legalidad en nuestro estado, además de la propia que representa la Comisión.

La colectividad está pendiente de nuestras autoridades y sus acciones, hoy más que nunca, los ciudadanos estamos ávidos de una nueva cultura y de gestiones firmes y concretas, en aras de la concordia y la certidumbre bajo la más diáfana honestidad. Tomar caminos distantes de la sociedad, representaría un retroceso que pondría en entredicho la democracia y lo reiteradamente señalado en el plan de trabajo de la 4T, que no es otra cosa que la visión del presidente de todos los mexicanos en el sano sentido de generar un cambio profundo para el país.

ABUELITAS:

Ningún partido hace servidores públicos o lleva al triunfo a un candidato, quien piense así, lo hace sin duda bajo un esquema erróneo y con abuso en el sentido de pertenencia.  Aunado sin duda, a una grave falta de sensibilidad humana. Los electores son quienes tienen la palabra en materia de decisiones y son a quienes se deben todos los servidores públicos, sobra agregar las razones supongo. Es cuanto.