Sutsam, ¿el Nuevo Sparring de Griselda?/Este Día, Claro que mis Mando Postdatas

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Punto (.) Rojo

Por: J. Baldomero Díaz Gaytán

Griselda Martínez es una mujer que se siente cómoda en medio de los conflictos. Incluso, cada día que pasa, deja públicas evidencias de que le gusta gobernar en medio de las turbulencias. Queda la impresión de que escoge a sus adversarios y aprovecha la vulnerabilidad de sus oponentes para inyectarle popularidad a su administración. Guste o no, se apruebe socialmente o no, la alcaldesa está imponiendo una forma de gobernar que tiene su eje en las confrontaciones llevadas a las redes sociales.

Ejemplos tenemos muchos. En los primeros meses de su administración se enfrentó con los integrantes de su Cabildo que no pensaban como ella, con Virgilio Mendoza, con Carlos Arellano, con Martha Sosa, las caras visibles por las que el ciudadano no votó en la elección del pasado primero de julio del 2018.

Después la agarró contra los periodistas, contra la que ella llama “la prensa fif”i. Griselda no respeta la libertad de expresión, aunque se le olvida qué, en la historia de Manzanillo, muy pocos como ella, ejercieron el periodismo libre. Griselda, está documentado en las audiotecas, se dio gusto despedazando dignidades políticas. Hoy, con ella, aplica de manera implacable aquélla frase de que “las carniceras de ayer son las reses del presente”.

Después la señora presidenta de Manzanillo tomó como su sparring al director de la Administración Portuaria Integral, a Héctor Mora, contra quien organizó una manifestación para que liberara una de las vialidades de la popular colonia de Las Brisas. Ella entendió que la API es una de las dependencias gubernamentales más arrogantes que tenemos en la ciudad de Manzanillo y encausó con esas marchas esas inconformidades sociales.

Y ahora, Griselda Martínez toma como sus rivales mediáticos a sus empleados, a los trabajadores sindicalizados agremiados en el Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento de Manzanillo. Se niega a darles un incremento salarial del seis por ciento que reclaman los líderes encabezados por Joel Salgado Acosta. Y la mujer es berrinchuda, es, como se dice coloquialmente, calzonuda. No les va a dar el incremento salarial y con ello estirará la cuerda, con el objetivo, de que las huelgas y los plantones de los trabajadores sean la cerezas en el pastel que justifiquen, en la práctica, la inoperancia y la ineficiencia en la que se encuentra actualmente el Ayuntamiento de Manzanillo.

Griselda es una mujer inteligente, es una mujer de izquierda que aprendió, en pocos meses, las reglas no escritas de la política. Ha tomado la decisión de poner en una balanza la opinión de los ciudadanos: ¿Quién está mas desprestigiado, los trabajadores sindicalizados del Ayuntamiento o la presidenta municipal? Ayer, por lo pronto, las redes sociales enviaron el primer mensaje: De cada diez comentarios, siete expresaban su molestia en contra de los empleados, a los que el ciudadano de las redes pone etiquetas relacionadas con la improductividad. Y hubo muchas muestras de solidaridad de la gente que motivaba a la señora Martínez “a no dejarse manipular por los líderes del Sindicato”.

Interesante el ambiente político que se vive en Manzanillo. La popularidad de Griselda Martínez, hoy lo entendemos, no depende de la eficiencia de sus programas de gobierno, ¡no!, depende, sin duda, de la capacidad que tenga para noquear a sus adversarios políticos, mismos que son, generalmente, identificados con el pasado de corto plazo. Por eso, Griselda Martínez, al negar el aumento salarial a los miembros del Sindicato de Trabajadores del Ayuntamiento llevó su administración a un nuevo ring: El choque entre la presidenta y los trabajadores del Ayuntamiento etiquetados como soldados del PRI.

En Manzanillo, insistimos, Griselda Martínez ya tomó como sparring al Sutsam. Y con ello, envía el claro mensaje de que con una huelga y con plantones en su contra, parece que quiere ocultar las ineficiencias de su gobierno. Pero bueno, como siempre tenemos que insistir en la tesis de que eso, sólo parece.

MIS POSTDATAS DE ESTE DIA

P. D. 1.- En política la forma es fondo. El líder del Sutsam es Joel Salgado, uno de los activos políticos más cercanos a Nabor Ochoa, a quien muchos ven como un potencial candidato a la alcaldía de Manzanillo. Griselda, dicen, ya piensa en la reelección. Por lo tanto, hay que empezar a comprender las jugadas de ajedrez político.

P. D. 2.- Algo anda mal en el gobierno de Locho Morán en Colima. Su nueva obra “rellenar el viejo lago del Parque Hidalgo, que está sin uso, desde hace poco más de diez años”. Es obvio que la administración de Leoncio no trae recursos, se están sepultando sus aspiraciones de querer ser el próximo gobernador de Colima.

P. D. 3.- Papelazo de la diputada federal del PRI, Ximena Puente, quien convocó a una ostentosa rueda de prensa para anunciar que “donaba mil 500 pesos a la Cruz Roja”. Vaya ridículo. Después le quisieron corregir la plana informando que la aportación había sido de 16 mil pesos, pero no funcionó. Ximena dejó de ser, ayer, precandidata a la gubernatura de Colima. Y dejó de serlo, como dicen en el argot popular “por coda”.

Y ni una línea más.