TAREA PÚBLICA
Por: Carlos Orozco Galeana
Con la encuesta efectuada por la alianza entre Pri, Pan y Prd, se cierra prácticamente el ciclo de un trámite de cara a la competencia electoral próxima que busca potenciar la competencia y presentar los perfiles más completos. Salió el resultado que se esperaba: Mely Romero superando a Martha Sosa ampliamente (67% contra 33%), quien de este modo arrancará su campaña con el objetivo fundamental de ganar la elección por la gubernatura y superar a quienes son sus más fuertes contendientes, Indira Vizcaíno y Virgilio Mendoza. Indira es la candidata a vencer porque va adelante ahora pero tiene una ventaja que podría disminuirse si ya no crece más y alcanzó su techo o si sus oponentes hacen campañas eficaces y convincentes.
El Pri tendrá que echar mano de toda su experiencia para retener una gubernatura que jamás ha perdido. Tiene en Mely una candidata magnífica, sin tacha y con bastantes atributos que la dignifican como una competidora leal, completa y eficaz. Y por supuesto, el tricolor ha de tener gente muy preparada en elecciones que tendrá que hilar muy fino para convencer al electorado que ahora tiene en la cuauhtemense a una candidata que garantiza buenas cosas para Colima los seis años siguientes. El Pri tiene seguramente el mejor equipo de campaña para estar a tono con MR y una dirección política reforzada con Arnoldo Ochoa. Por cierto, en el discurso del Pri ya no cuenta tanto, entre sus cuadros destacados, el “primer priista”, a juzgar porque en la ceremonia ultima del tricolor ni se le mencionó.
Precisamente, de cara a las posibilidades de los competidores, mi colega Baldomero Díaz en su colaboración del 3 del mes presente, citó una encuesta elaborada por la empresa Percepción 21 pagada por un grupo de empresarios a los que les gusta mucho la política, misma que merece atención. Si las estimaciones logradas fueran correctas, tendríamos que:
No hay referencias metodológicas de tal ejercicio, pero los resultados estimo que se antojan reales. Muestra claramente el adelanto de Indira Vizcaíno en seis municipios, incluidos dos de los grandotes, Tecomán y Villa de Alvarez, más cuatro de los “chiquitos”, pero le pisan los talones en 4. En ellos pueden rebasarla. Virgilio Mendoza está fuerte en Manzanillo y Minatitlán y casi empata con Indira en Armería. Es también competitivo en Villa de Alvarez y Tecomán. Se ha sumado a la tercia que definirá al ganador (a). Locho está fuerte en su municipio aunque apresuran Indira y Mely. Tiene presencia importante en Villa de Alvarez, pero no pinta en Manzanillo ni Tecomán. Claudia Yáñez, de presencia reciente respecto a sus adversarios, trae en promedio entre 4 y cinco puntos porcentuales a favor, los que seguramente aumentará conforme avance su campaña. Es una incógnita cuántos votos quitará a Indira. Observé también en la encuesta de Percepción 21 que Mely Romero gana un municipio pero aparece muy competitiva en 7 de los diez municipios, por lo que está razonablemente ubicada nada más comenzar las acciones.
La encuesta revela que, en la mayoría de municipios, los que lideran la competencia tienen cerca a sus competidores. Nada está escrito, no hay nada para nadie aún. La pregunta en este momento es qué tan estructurada y creíble pueda ser la agenda de cada candidato (a) y qué capacidad tendrán las formaciones políticas en el despliegue logístico considerando las restricciones por la pandemia.
En este contexto, jugarán un papel vital las ahora no tan “benditas” redes sociales y la capacidad de comunicación que tenga cada uno de los candidatos (as). Pienso que se moverá lo suficiente el ámbito de las preferencias. Los últimos dos años, jugó sola Indira Vizcaíno por su ubicación burocrática al igual que casi todos sus compañeros que ocuparon delegaciones en el país. No podría ser de otro modo. Indira aprovechó tal circunstancia y ahora está en posibilidad de ganar la gubernatura si no comete errores y sus adversarios equivocan estrategias. Pero reitero, nada está escrito en política por anticipado, y pueden ganar tanto ella como Mely, Virgilio y Locho en ese orden aunque está colocada mejor la primera. Los tres crecerán.
Tendremos una competencia distinta a las del pasado. Antes, el Pri se enfrentaba casi cómodamente solo al Pan, que a punto estuvo de ganar dos veces la gubernatura, pero se desinfló últimamente porque desanimó al panismo bueno los cacicazgos existentes ahí. Pero, solo hay uno. Hoy, el tricolor tiene en contra a Morena y la poderosa influencia del gobierno federal (Amlo es un jugador que no se quedará con los brazos cruzado viendo cómo superan a sus candidatos (as), y la alta competitividad de Virgilio y Locho. Tiene la ventaja, eso sí, de ser el mejor estructurado, el que mejor se mueve en el territorio, pero hay la incógnita de cómo responderán sus bases de simpatizantes y la sociedad civil frente a la suma del Pan y Prd. No se sabe tampoco, en alguna medición, qué piensan en general los ciudadanos que han votado por esos dos partidos, sabiendo que su voto, en junio próximo, favorecerá al tricolor en la elección de gobernador(a). Pero si esa fracción ciudadana considera que el eventual gobierno de Morena sería una amenaza para la estabilidad, no tendrán otro camino para evitarlo que votar solidariamente. . .