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Shanghái,.- Alejandra Barraza y su novio llegaron a China en enero, cuando no había emergencia global por coronavirus. La cuarentena, el aislamiento y la falta de insumos, los alcanzó en su viaje de negocios.
Hoy, son parte de un grupo de 23 mexicanos que busca salir de suelo chino, aún sin respuesta de las autoridades diplomáticas mexicanas.
“Vivimos momentos bastante duros, por la incertidumbre de no estar en tu país. La información era casi nula”, compartió Barraza al portal web Excélsior vía WhatsApp desde Shanghái.
En abril pasado, México y China establecieron un puente aéreo para el envío de insumos médicos hacia nuestro país.
En total, se realizarán 11 traslados como parte de este programa binacional.
El primero de ellos llegó el 7 de abril, con mil 184 cajas en las que había 10.1 toneladas de guantes de exploración y mascarillas KN95, provenientes, justamente, de Shanghái.
Según el medio digital, a través de autoridades diplomáticas de la nación asiática, los ciudadanos han buscado viajar en esos vuelos.
Sin embargo, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) respondió vía Twitter que esos vuelos eran considerados de carga, y no de pasajeros, por lo que no podían abordarlos.
A sus llamados en redes sociales respondió Roberto Velasco, responsable de comunicación de la SRE.
Entre todos, se han comunicado con los consulados de Shanghái, Pekín y Guangzhou, a través de emails, llamadas y reuniones.
Pero no ha sido suficiente, y permanecen varados lejos de casa.
“Hasta ahora, los consulados sólo nos han ayudado con algunas rutas de vuelos. Pero esas rutas tienen restricciones de tránsito, además de que los precios son de hasta 150 mil pesos, y lo peor es que corren el riesgo de ser cancelados”, lamentó Alejandra.
Además, las visas de la mayoría de ellos ya vencieron. Y está por expirar el permiso humanitario que otorgó el gobierno chino en marzo pasado, con un plazo de dos meses.
“El no poder salir de China a tiempo nos resultaría en una multa, encarcelamiento o deportación”, externó Alejandra.
De acuerdo con la cancillería, aún quedan dos mil 819 mexicanos varados en el extranjero.
“Los recursos económicos también empiezan a escasear, o sea, el dinero de los vuelos se lo están gastando en comida y hospedaje. La mayoría estamos subsistiendo con ahorros que teníamos o préstamos de nuestras familias”, subrayó Alejandra.
Con información de EXCÉLSIOR