LA CRÓNICA DE HOY
Estados Unidos.- La revista estadunidense “Time” anunció hoy la selección de Papa Francisco como “Persona del Año 2013” por su capacidad de transformar a la Iglesia católica en apenas nueve meses de papado.
Jorge Mario Bergoglio, de 77 años, fue escogido entre una quinteta de finalistas que incluyó al ex contratista de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA), Edward Snowden, la activista Edith Winston, el presidente de Siria Bashar Assad y el senador conservador cubano americano Ted Cruz.
“Por sacar al papado del palacio y llevarlo a las calles, por comprometer a la iglesia más grande del mundo a confrontar sus más profundas necesidades y por hacer un balance entre juicio y misericordia”, el Papa Francisco es la Persona del Año 2013″, explicó la editora de la publicación Nancy Gibbs.
El Papa Francisco fue descrito por la revista como una “estrella de rock” que ha logrado atraer la atención del mundo, desde sus plegarias por la paz en Siria hasta sus críticas a las políticas económicas que favorecen a los ricos.
“En menos de un año (el Papa Francisco) ha hecho algo extraordinario no ha cambiado las palabras sino ha cambiado la música. El tono y el temperamento importa de una iglesia construida sobre una sustancia de símbolos”, señaló.
“Time” sostuvo que las declaraciones y las acciones del Papa Francisco tienen el potencial de molestar lo mismo a liberales que a conservadores, por ello ha sido comparado lo mismo con Martin Luther King que con Carlos Marx.
“Cuando uno es una celebridad para los medios informativos, cada palabra es disectada y aún aquellas de las que no se habla”, dijo Gibbs.
“Time” se preguntó en ese sentido las razones por las cuales el máximo jerarca de la Iglesia católica no ha hablado en mayor profundidad del escándalo sexual, aún cuando estableció una comisión para lidiar con el problema.
La publicación señaló en ese sentido que el Papa Francisco reafirma las enseñanzas tradicionales sobre la sexualidad y advierte que la Iglesia sea distraído por ellas, al tiempo que cuestiona a los sacerdotes que se rehúsan a bautizar a niños nacidos fuera del matrimonio.
“En estos días es reconfortante escuchar a un líder que dice cualquier cosa que incomoda a cualquier. Ahora los liberales y los conservadores enfrentan un dilema conforme escuchan a la nueva voz de la conciencia”, señaló Time.