“Necesitamos privilegiar el ser, no el tener”: Miguel Arriola

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*La escuela de Filosofía y la Facultad de Psicología organizaron IV Foro Académico de Estudios Animalistas y Prácticas Especialistas.

CN COLIMANOTICIAS

Colima.- Esta semana, la Escuela de Filosofía y la Facultad de Psicología de la Universidad de Colima realizaron el IV Foro Académico de Estudios Animalistas y Prácticas Especialistas, que abrió con la conferencia: “Ser vegano y decrecer: la explotación animal como depredadora del planeta”, a cargo del deportista y activista ambiental Israel Miguel Arriola Toiber.

En su charla con alumnos de esta casa de estudios, explicó que es necesaria una desaceleración en el consumo de productos de origen animal, “ya que estamos al borde del colapso y nuestro planeta se encuentra al límite; no podemos sostener más tiempo los hábitos de consumo que tenemos. Necesitamos una vida más sencilla y menos consumista, donde se privilegie el “ser” y no el “tener”.

Mencionó que históricamente la ganadería llegó a nuestro país con la conquista de los españoles, una actividad que fue por mucho tiempo única y exclusivamente de los españoles y no para los indígenas. “Entre los años 80 y 90 se establecieron las bases de la ganadería y del campo mexicano, detonando también un problema de salud en el aumento de la tasa de enfermedades crónico-degenerativas”.

Además, Miguel Arriola dijo que para producir un kilogramo de carne se necesitan siete kilos de cereales y granos, cantidad con la que se podrían alimentar más de cien personas.

La ganadería, añadió, es la principal responsable del cambio climático, al emitir la tercera parte de los gases invernadero a través de las heces y gases de los rumiantes, además de que, a causa de esta actividad, se están deforestando selvas y bosques para sembrar los forrajes que alimentan al ganado, aunando también el gasto de agua, energía y fertilizantes.

Finalmente, concluyó que es necesario un cambio en los hábitos alimenticios por una dieta más saludable que incluya más vegetales, “ya que al dejar de comer carne se tiene un mayor impacto en la salud, la ecología y en nuestro planeta”.