¿Qué sería de la vida
si no tuviéramos el
coraje de intentar nada?
Vincent Van Gogh.
Por: Manuel Olvera Sánchez.
El espíritu de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos al dividir en poder Legislativo, Ejecutivo y Judicial obedece básicamente a lograr equilibrio en la toma de decisiones de los tres poderes; dichas disposiciones pretenden erradicar de raíz el absolutismo imperante a través del presidencialismo que prevaleció durante muchos años en nuestro país.
Vale recordar que la división de poderes en nuestro país básicamente se encontraba plasmado en nuestra Carta Magna , sin embargo, no pasaba de ahí, era algo que sabíamos que existía, pero que el sistema presidencialista durante el cual vivimos más de 80 años logró imponerse y las decisiones trascendentales en la vida del pueblo mexicano solían dictarse desde Palacio Nacional o en los pinos.
Retomando lo señalado en el párrafo anterior, la división de poderes en nuestro país se remonta al año de 1824, año en el cual la Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos contemplaba los tres poderes, división de poderes que es el pilar de un país democrático en el cual debe imperar el estado de derecho.
La división de poderes surge básicamente ante un absolutismo monárquico en el cual todas las decisiones las tomaba el rey en turno, situación que no permitía lograr equilibrio de ninguna naturaleza, incluyendo las relacionadas con la justicia y con la expedición de leyes en favor del pueblo.
Desafortunadamente lo que estamos viviendo en nuestro estado es una ofensa al espíritu de la Constitución al buscar equilibrios entre los tres niveles de Gobierno, al espíritu de erradicar visiones de gobierno absolutistas que lamentable hoy en día siguen vigentes debido a que quienes representan al pueblo se han olvidado que su compromiso elemental es defender los intereses de quienes los eligieron.
Lamentable que los legisladores actúen bajo una visión retrógrada , omitiendo toda la lucha que se ha llevado a cabo con la finalidad de lograr los contrapesos entre ambos poderes , sin embargo, no debemos dejar de observar los orígenes de algunos de ellos , ya que en mucho de eso depende su proceder, quizá algunos actuaron apostándole a asegurar su futuro.
El actuar de los legisladores con relación al nuevo crédito autorizado al gobernador evidencia un total sometimiento a los dictados de quien representa al poder ejecutivo, evidencia una vez más que pueden más los intereses particulares de los legisladores que el interés colectivo de quienes los eligieron, han actuado de manera omisa ante la visión de grandes pensadores como Montesquieu que a través de los años aportaron sus ideologías con la finalidad de lograr contrapesos entre los poderes ejecutivo , legislativo y judicial.
Los actuales legisladores han prostituido al poder legislativo, han ignorado el hartazgo de la sociedad ante un gobernador indolente e indiferente que lo único que ha logrado durante su gestión es hundir financieramente al estado de Colima, ha sido tan desastrosa su administración que no existe obra trascendental que repercuta en mejoras en la calidad de vida del pueblo noble y generoso de Colima , pero siempre contando con el aval de unos legisladores mercenarios que se venden al mejor postor.
Los legisladores han traicionado al pueblo de Colima, los colimenses están decepcionados del proceder de Diputados como Guillermo Toscano que jamás imagino encontrarse con un escenario como el que está viviendo, un personaje improvisado de la política que cuando se encontraba en campaña su mayor logro fue colocar 83 calcomanías a los vehículos en el semáforo de la colonia Villa Izcalli.
Un Guillermo Toscano que renuncia a la bancada del partido Movimiento de Regeneración Nacional ( MORENA), pero no renuncia al partido, que no renuncia a sus ingresos como legislador, evidenciando una total incongruencia, un legislador que destila podredumbre, hambre y miseria; lo único que lo alimenta es el hueso.
Unos legisladores del Partido Revolucionario Institucional (PRI) , que si bien es cierto obedecen a intereses que les dictan desde casa de gobierno evidenciando lealtad al titular del poder ejecutivo, olvidan que se deben al pueblo antes que a intereses particulares y más aún, violentando la autonomía en la toma de decisiones del poder legislativo.
En la historia de las Legislaturas pasadas nunca se había percibido un ambiente tan denigrante para la investidura que representa ser un representante popular y máxime que el pueblo les otorgo la confianza asqueada de tanta politiquería por el régimen anterior, muy lamentable que la historia ya los haya registrado como unos mercenarios de la política.
Vale recordar que los que resultaron electos abanderando los dictados de la 4T traicionaron los dictados que prometían poner fin a gobiernos pasados en los cuales el común denominador fue la corrupción, buscaron el voto con promesas falsas, engañando al noble pueblo, la razón de su proceder es del dominio público, la esperanza de todos nosotros por cambiar el rumbo del estado, ustedes la han sepultado, y me refiero en particular a los legisladores de la 4T ya que tuvieron en sus manos el futuro de las generaciones venideras.
Que lamentable su proceder, que estén actuando de manera omisa ante los reclamos por parte del pueblo por cambiar la forma de hacer política, muy triste que estén dejando morir solo al presidente de la República, pero más triste es que les tiemble la mano y les ganen sus intereses, tuvieron la oportunidad de hacer historia para bien del pueblo, sin embargo, pasaran a la historia como unos legisladores de pacotilla.
Retomando las palabras del vicepresidente del Gobierno de Felipe González, Alfonso Guerra al señalar que Montesquieu había muerto, se refería precisamente a que en ese momento la separación de poderes en España solo existía en las leyes, mas no era una realidad; suerte similar que estamos viviendo en Colima.
¡MÉXICO, HAZ MEMORIA!
La visión que tenías sobre mí, no la defraudare, eso me fortalece aún más, serás ese impulso para lograrlo.
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