En sus argumentos, la representante popular del estado de Colima indicó que hoy México cuenta con un bono demográfico que debe ser aprovechado, ya que la población en edad de trabajar es mayor que la población dependiente (niños y adultos mayores), lo que implica que el potencial productivo de la economía es mayor. Sin embargo, la pirámide poblacional en los próximos años cambiará y las personas mayores de 60 años serán mayoría.
Ante esto, las senadoras y senadores integrantes del Grupo Parlamentario del PRI de la LXII Legislatura, reconocieron la importancia de trabajar preventivamente para hacer frente a este importante fenómeno que se aproxima.
“Desde la Cámara de Senadores debemos impulsar las directrices que se deben tomar para valorar el bono demográfico que hoy tenemos como nación y comenzar con la planeación de las políticas públicas encaminadas a enfrentar el envejecimiento que la población de nuestro país tendrá en las próximas décadas”.
Por citar un ejemplo, explicó Romero Celis, uno de los mayores problemas a los que se enfrentarán los adultos mayores, es su precaria situación económica. En virtud del alto porcentaje de la población económicamente activa que labora en el sector informal, solamente un sector relativamente pequeño paga un seguro de pensiones o cotiza en el Seguro Social.
Y precisamente, el Banco Mundial afirma en su diagnóstico que la estructura de la protección social en México está fragmentada y presenta serios problemas de igualdad y eficiencia, pues conserva el sistema dual, con un régimen que proporciona beneficios de retiro y salud a empleados del sector formal, primordialmente mediante el IMSS y el ISSSTE.