Edgardo Zamora|CN COLIMANOTICIAS
Colima, Col.- A la dirigencia estatal del Partido Revolucionario Institucional le sorprendió que la perredista Martha Zepeda del Toro, no condenara la misoginia y la violencia política de género hacia la presidenta del Comité Directivo Estatal del PAN, Julia Licet Jiménez Angulo, de parte de su correligionario Enrique Michel Ruiz.
Rogelio Rueda Sánchez mencionó que en diversas entrevistas radiofónicas que en días pasados concedió Enrique Michel, el depuesto expresidente estatal de Acción Nacional llamó a Jiménez Angulo títere de Pedro Peralta.
Cuestionado sobre los señalamientos de la delegada del PRD en Colima, Martha Zepeda, en el sentido de que el gobernador José Ignacio Peralta había cometido misoginia contra la exdirigente del PRI en Villa de Álvarez, Rueda Sánchez señaló que las únicas acciones misóginas documentadas contra una dirigente partidista, son las que sufrió Julia Jiménez de parte de Enrique Michel.
“En días pasados de manera pública, en una gira por diversas estaciones de radio, el depuesto exdirigente estatal del PAN, Enrique Michel, insultó públicamente a una compañera de su partido. Lanzó expresiones llenas de misoginia y de una evidente violencia política de género en contra de una correligionaria suya”, señaló el priista.
Recordó que Michel Ruiz, en lugar de respetar a Julia Jiménez, la injurió llamándola “títere de Pedro Peralta, lo que está documentado es el insulto y la agresión que fueron públicas”.
Dijo que para quienes conocen a Enrique Michel no sorprende en lo absoluto su conducta, ya en una ocasión se refirió despectivamente por el color de su piel a un funcionario de la desparecida Contaduría Mayor del Congreso del Estado.
“Lo que debo confesar que personalmente sí me sorprendió, es que la dirigente perredista Marta Zepeda haya permanecido callada ante esta pública, evidente y violenta agresión de género.”
Rogelio Rueda dijo sorprenderle el desdén de Zepeda del Toro en la defensa hacia Julia Licet Jiménez Angulo, no sólo por su condición de mujer, sino por su condición de aliada electoral, que hoy por hoy, por ser la presidenta del Comité Directivo Estatal del PAN, se supone debería ser considerada por la perredista como su aliada política.
Finalmente, expresó que esa falta de solidaridad ante una mujer es lo que sí “debe sorprendernos de la actitud de la dirigente perredista. Y puede llegar a confundir más a los que impulsan a esta de por sí confusa y contradictoria alianza electorera entre PAN, PRD y MC”.
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