ANIMAL POLÍTICO
México.- México es el país del continente americano con la tasa más alta de consumo de alcohol per cápita en adultos hombres (32 litros), mientras que el promedio para la mujer mexicana es de 18 litros, reveló el informe más reciente sobre traumatismos relacionados con el alcohol en las Américas, un reporte elaborado por la Organización Panamericana de la Salud (PAHO) en conjunto con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Irónicamente, nuestro país también tiene una de las tasas más altas de abstención en la región (55% de hombres y 82% de mujeres), lo que significa que los mexicanos que beben lo hacen de manera más intensa. Presentamos “consumo compulsivo e ingestas episódicas de grandes cantidades de alcohol” concluye el análisis.
La publicación “Prevención de los traumatismos relacionados con el alcohol en las Américas” contiene una radiografía de estudios realizados en Argentina, Brasil, Canadá, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, México, Nicaragua, Panamá y República Dominicana, a lo largo de varios años, sobre la carga del alcohol en las lesiones traumáticas, además de la perspectiva, desde el punto de vista de la investigación y la política, del estado actual del conocimiento sobre la asociación del alcohol con los traumatismos.
Para nuestro país, un resumen exclusivo detalla que el consumo de alcohol fue el principal factor de riesgo de padecer enfermedades en las personas de 15 a 49 años de edad en México y contribuyó a 13% de las defunciones y la discapacidad (años de vida perdidos ajustados por discapacidad) en la población de esta edad.
El alcohol figura en el 51% de todas las lesiones asociadas con violencia en México y fue un factor de riesgo en 78% de los casos de muerte y discapacidad asociados con lesiones traumáticas en México. Los trastornos por el consumo de éste representaron, en total, 310 mil 684 años de vida perdidos.
El informe completo para la región precisa que el consumo total per cápita de los adultos en la mayoría de los países de las Américas es superior al promedio mundial. De todas las regiones, el mayor consumo per cápita correspondió a la región de América del Norte de ingresos altos, seguida por la región meridional y la región tropical de América Latina; el Caribe fue la región con el menor consumo per cápita.
El documento concluye que mientras que México ha ejecutado políticas destinadas a disminuir las lesiones traumáticas relacionadas con el alcohol, entre ellas impuestos, restricciones de comercialización y pruebas de alcoholemia aleatorias, se requieren “nuevos esfuerzos que disminuyan la disponibilidad del alcohol y refuercen la aplicación de las políticas existentes”.