LEONCIO ALFONSO LÓPEZ OBRADOR

0

AL DESNUDO

Por: Edgar Rodríguez

Primero fueron sus declaraciones en las que se asumía más López Obradorista que el enemigo público número uno de la Universidad de Colima, Vladimir Parra Barragán. Luego salió con su octágolo de principios copia al carbón de lo mismo que predica sin aplicar el líder moral de la 4T. Después, con su cultura de la paz como estrategia para combatir la inseguridad, que es lo mismo, pero más inoperante que los abrazos y las becas del Gobierno Federal que han fracasado rotundamente, pues los balazos se han incrementado en número y calibre, así como las muertes violentas de cada día más y más mexicanos.

Pudieron haber sido siete, nuevo o diez, y no ocho, los mandamientos de la Tabla de Leoncio Alfonso que recibió en el Cerro de la Cumbre de manos del Mesías Tabasqueño, pero como su creatividad no le da para más, sigue casado para todo su cabalístico número ocho derivado de locho. “Primero la gente, después la gente y al final la gente”, es el primer sesudo mandamiento de su octágolo plagiado a Andrés Manuel. Luego viene el segundo que sentencia lo mismo que éste, “cero tolerancias a la corrupción”, mal social más resistente que el virus Sars cov 2. Entre más lo combaten en los discursos de campaña más florece.

“Vamos a servir, no a servirnos”, misma promesa incumplida hecha reiteradamente por el todavía presidente de la Republica, igual que la del número cuatro de “nadie por encima de la Ley”. En su nada original quinto mandamiento, L8 sentencia que “la confianza de la gente no se traiciona”, ni se le roba la esperanza ni se le miente, sólo se le dice al oído que quiere oír.  Una vez más presume de lo que carece.

“Adiós a los privilegios”, número seis; y el siete, “Con los ciudadanos todo, sin los ciudadanos nada”, frase ésta con la que de plano se les fundieron los fusibles a los creativos de campaña de morán Sánchez. Cierra en el número ocho con su afirmación de que “viene a trabajar por Colima”, no a robar ni a mentir ni a traicionar, sino todo lo contrario, misma prédica de los fieles de la nueva religión política 4Téista que tiene al país sumido en la violencia agraviada, la profunda crisis de salud que no tiene salida y el estancamiento económico. Segundas partes nunca han sido buenas, y menos lo serán copias chafas de credos y mandamientos ajenos como los que le ha fusilado sin pudor alguno Leoncio Alfonso a Andrés Manuel

“Ni con más metralletas y ni con más abrazos (Amloístas) vamos a resolver el tema de inseguridad que azota al país y por ende a nuestro Estado”, Morán Sánchez coincide y disiente a la vez de AMLO, apostándole a la formación de ciudadanía (polvos de sus viejos lodos panistas) y a un Sistema de Justicia Cívica “como el que implementamos en la capital”, mismo que sólo ha servido para multar automovilistas y   ciudadanos por reales o supuestas faltas administrativas.

Queda más claro que el agua de Ciapacov que el objetivo del por cuarta vez candidato a la gubernatura del estado es erigirse en el AMLO de Colima, desplazando a su contrincante de MORENA, Indira Vizcaíno Silva, a quien no baja de priista a pesar de que él mismo está rodeado de varios conspicuos miembros de la “Chiquimafia” tricolor que tiene secuestrada a “nuestra Colima” desde hace treinta años. En fin, Locho y figura, hasta su octava candidatura en el año 2045.

Se dice que…

*Fuertes, competitivos, ganadores, se ven desde el arranque de sus respectivas campañas los candidatos a diputados por los distritos electorales federales Uno y Dos, Riult Rivera Gutiérrez (PRIANPRD) y Sergio Agustín Morales Anguiano (PVEM; y Óscar Ávalos Verdugo (PRIANPRD) Y Rafael Mendosa Godínez (PVEM, respetivamente. De entre ambos los que representen al pueblo de Colima en la próxima legislatura de la Cámara Baja del Congreso de la Unión, sin ser cooptados por el Ejecutivo Federal para que no le quiten ni una coma a sus propuestas de ley.

*Interesante el “Decálogo para ganarle a Morena” publicado recientemente por Demetrio Sodi De La Tijera, gran conocedor de la vida, obra y milagros de AMLO. Van los tres primeros dirigidos a los partidos y candidatos de verdad opositores a la 4T:

•          López Obrador no compite en esta elección por lo que no debe hacerse campaña en contra de él o de su gobierno. Nos guste o no, su nivel de popularidad sigue muy alto y mucha gente sigue creyendo en él a pesar de que se da cuenta que el gobierno va mal. Criticar a López Obrador todavía provoca una reacción contraria y de miedo entre los indecisos.

•          Ignorar las provocaciones de las mañaneras. Con los candados que le puso el Tribunal Electoral, se van a convertir en un espacio de provocaciones y descalificaciones a todo lo que se hizo en el pasado, por eso hay que ignorarlas y hacerle el vacío a todo lo que diga López Obrador.

•          El eslabón débil es Morena, que no representa nada sin la figura de López Obrador. El desorden, desorganización, confrontaciones y falta de liderazgos de Morena son factores que van a pesar mucho en las elecciones y que debe aprovechar la alianza Sí por México para consolidarse como la alternativa ante los electores.