Hay baja densidad del mosco; no se recomienda fumigación

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* La temperatura baja aletargó crecimiento de larvas y zancudos, señala la Secretaría de Salud

Redacción|COLIMANOTICIAS

Colima, Col.- Las temperaturas bajas que se han presentado durante el invierno en el Estado han aletargado el crecimiento de larvas y moscos en su ciclo biológico, lo que ha ocasionado una baja densidad del mosco que transmite el dengue, Chikungunya, Zika y paludismo, el Aedes aegypti, por lo que en este momento no se requiere ni es recomendable implementar acciones de fumigación, informó la Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado.

La dependencia, a través del Departamento de Vectores, dijo que se tiene un monitoreo de la presencia del mosco transmisor mediante las 6 mil 500 ovitrampas que se tienen instaladas en las cinco localidades donde se concentra la mayor población del Estado, en los municipios de Armería, Colima, Manzanillo, Tecomán y Villa de Álvarez, lo que permite observar la manera en que se desplaza la densidad de los moscos.

En base a las lecturas de las ovitrampas, agregó que se ha observado que vuelan moscos que en su mayoría sólo representan una molestia sanitaria, ya que no son los moscos transmisores de las enfermedades.

Explicó que cuando se recibe el reporte de un caso sospechoso o probable, se acude a realizar el rociado intradomiciliario en esta casa y 12 viviendas alrededor para evitar que el mosco infectado vaya a propagar la enfermedad entre la población.

Por ello, señaló que ante la sospecha de un caso o casos de zika, se implementará una acción inmediata: el rociado intradomiciliario en la vivienda del caso probable, así como fumigación con equipos térmicos y en unidades pesadas en estos sitios donde se presenten casos probables de la enfermedad.

Vectores indicó que en este momento la mejor medida es la prevención, mediante la eliminación de criaderos del mosco con las sencillas medidas de lava, tapa, voltea y tira, ya que así disminuye la densidad del citado Aedes y, por tanto, hay menos infección o infectados.

Mientras tanto, refirió que se siguen las acciones de control larvario en las viviendas, en donde se invita a las personas a realizar las citadas medidas de prevención en sus casas y se coloca larvicida en recipientes donde se acumula agua.

Asimismo, afirmó que para la fumigación se emplean productos de calidad y avalados por la Organización Mundial de la Salud, Organización Panamericana de la Salud y el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (CENAPRECE), además que se cuenta con los registros en la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS).

En este sentido, en la lista actualizada de productos recomendados por el CENAPRECE para el combate de insectos vectores de enfermedades a partir del 2016 se contemplan 6 larvicidas (químicos, biológicos y misceláneos) y 3 adulticidas (pabellones impregnados con insecticida y tabletas efervescentes para impregnar).

Añadió que a nivel nacional también se han establecido unidades de bioensayos para medir año con año la susceptibilidad y la resistencia de los insecticidas que se utilizan, además de que se realiza la rotación de los mismos para evitar crear una resistencia en los moscos.

Finalmente, expresó que los equipos que se usan para la fumigación están avalados y calibrados para no hacer daño ecológico importante porque los productos no atacan exclusivamente al Aedes aegypti, sino que también se lleva especie de insectos benéficos.