A ganar ahora

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*Los Mavs quieren ser campeones de la NBA otra vez, y con la llegada de Rajon Rondo están a punto de convertirse en un contendiente por el Oeste; aún van por un defensivo.

Jesús Serrano | LA AFICIÓN

Ciudad de México.- La razón por la cual Mark Cuban desmanteló al equipo campeón de 2011 fue porque quería renovar el plantel de los Mavericks aprovechando los últimos años de Dirk Nowitzki. La llegada de Rajon Rondo cambia su discurso a: ganar ahora.

En el papel, desde el comienzo de esta campaña Dallas ha intentado volver a la estructura de ese conjunto que derrotó en seis juegos al Heat de Miami. Regresó Tyson Chandler para patrullar la llave junto al movedor Raymond Felton (que no ha jugado por lesión) para explotar el pick and roll, contrataron a Chandler Parsons para hacer combo con Monta Ellis y formar algo parecido a lo que tenían con Shawn Marion y Jason Terry, y la cereza del pastel es la misma llegada de Rondo para buscar una versión más joven de Jason Kidd y su visión periférica.

La clave de ese equipo campeón (además de Nowitzki en la campaña más completa de su carrera), fueron las quirúrgicas rotaciones de balón y la práctica de la defensiva, con Chandler como bastión, convirtiéndose al año siguiente, cuando ya había sido traspasado a los Knicks de Nueva York, en el Jugador Defensivo del Año.

Es la aptitud a la defensiva la que hacía que Dallas no fuera considerado en esta campaña como contendiente. Porque por un lado su ofensiva no tiene problema al promediar 109.7 por partido, la mejor de la NBA, con Nowitzki marcando 18.6 por encuentro sin ser siquiera el principal anotador del equipo.

Pero su defensiva acepta 102.4 (23) y Parsons no se caracteriza por su defensiva, Monta Ellis, el líder encestador, necesita el balón para crear su tiro, obstruyendo el lujo de balón que era la marca de los Mavs de 2011.

Son las cosas que se espera que Rondo mejore, y los Mavericks pueden darse el lujo de tener a un movedor con .251 en triples pero que este ciclo ha anotado solo 12 de 36 desde la línea de libres (algo inaceptable) y no ha desarrollado un tiro de media distancia. Pero lo que les da el jugador de 28 años, líder de asistencias en tres de los últimos cuatro años, es la capacidad de ganar el rebote e iniciar el rompimiento rápido para encontrar al gran arsenal con que cuenta Dallas.

Los Mavs pagaron mucho por su nueva estrella, y esas ausencias les han perjudicado en su nuevo esquema. Ya no tienen al líder NBA en efectividad bajo el aro, Brandan Wright, ni la versatilidad de Jae Crawder (rebotes y triples), y si la dinámica de devolver el equipo al esplendor y el estilo de 2011 continúa, lo siguiente es buscar a alguien que recupere la solidez defensiva que les daba Marion y la ofensiva instantánea desde la banca que les brindaba Jason Terry, Caron Butler y Corey Brewer.

Dallas realizó un cambio que los lleva a estar un paso más cerca de poder modificar sus posibilidades en la tremenda batalla que se vive cada día en la Conferencia Oeste.

El conjunto está a medio camino de su objetivo de volver al balance de su único año como campeones, la temporada 2010- 2011, antes del cierre del periodo de transferencias intentarán robustecer su defensiva al ya tener apalabrado al centro veterano Jermaine O’Neal para su empuje a playoffs, y buscarán ganarle a Golden State la pugna por Ray Allen. Dallas se ha metido de lleno a la lucha en el Oeste, la cual podría imponer récord de competitividad.