Falsos los mitos sobre la lactancia materna: Salud

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*Mujeres con pecho pequeño y embarazadas sí pueden amamantar, aclara

Redacción|COLIMANOTICIAS

Colima, Col.- La Secretaría de Salud y Bienestar Social dijo que las mujeres con pecho pequeño sí pueden amamantar al bebé, la que está embarazada puede seguir amamantando y que todas producen leche de buena calidad y en cantidad suficiente, por lo que es falso lo que se indique en contrario acerca de estas afirmaciones basadas en estudios.

Agregó que la lactancia materna es la forma ideal de aportar a los bebés los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables, aunque existen mitos por los cuales las madres deciden no amamantar a su pequeño hijo.

Por ello, indicó que es falso que las mujeres no puedan comer ciertos alimentos durante la lactancia y en el periodo de gestación, afirmando que no hay alimentos que aumentan o disminuyen la producción de leche y que a mayor succión corresponde una mayor producción de leche.

Asimismo, es incorrecto que la madre que está enojada o asustada no debe de amamantar, ya que el estrés o miedo extremo puede aletargar el flujo de la leche, pero se trata de una respuesta temporal del organismo ante la ansiedad.

De la misma manera, dijo que es falso que el calostro (leche que la madre produce en los primeros tres días después del parto) debería ser desechado porque es sucio y antihigiénico; al contrario, indicó que el calostro contiene muchos nutrientes y factores de defensa que fortalecen el sistema inmune del bebé e inclusive se considera como la primera vacuna.

La dependencia señaló que también es inexacto que las mujeres con pecho pequeño no pueden amamantar, toda vez que el tamaño de los pechos no influye en la lactancia, y que no todas las mujeres producen leche suficiente para satisfacer al bebé; al contrario, todas las mujeres producen leche de buena calidad y en cantidad suficiente.

Respecto a la idea de que la madre embarazada de otro bebé debe dejar de amamantar, indicó que la madre puede seguir amamantando, pues algunas hormonas que el cuerpo produce en el período de gestación pueden cambiar el sabor de la leche, pero no su calidad.