La directora de la Clínica de Adicciones Karina Hurtado Martínez, confirmó que los resultados de los últimos años en sus estadísticas así lo demuestran “definitivamente es cierto, también es menor la edad ya sea con sustancias legales como el tabaco y alcohol, no en un inicio una sustancia ilegal sino con sustancias a la mano”.
Respecto a la situación de los menores, dijo que la edad que han llegado a atender es de 14 años y lamentó que todavía no exista un lugar para atender solamente a menores ya que no resulta muy positivo internarlos con otro tipo de pacientes “la realidad nos rebaza, cada vez es menos la edad y yo no puedo dejarlos desprotegidos, si les digo que esperen un año tal vez ya le dio un paro, o ya está en un Cereso entonces sí aceptamos menores, pero damos información a la familia porque ellos tienen que firmar y responder por ellos y se da aviso al ministerio público para que no se maneje de otra forma”.
Explicó que muchas de las ocasiones los menores no tienen aún una dependencia y no ocupan internamiento, por lo que son referidos a otra institución como los Centros Nueva Vida “Los padres de familia a veces se molestan, pero aquí hay personas que han consumido de todo, entonces sin querer los contamino, tengo personas que han estado en un Cereso y no puedo negar el acceso por esos antecedentes, entonces, si a un adolescente lo ingreso con una persona adulta consumidora que le va a decir las sustancias que no conoce y cómo se usan y qué pasa en un Cereso, pues va a salir peor”.
En el tratamiento residencial, explicó que el tratamiento es complicado debido a que el paciente sufre mucho, “tiene fuertes dolores y el medicamento que nosotros les podemos suministrar tal vez son mucho menor efecto que les causaba la heroína, es complicado, pero es posible hay pacientes que han salido pero la gran mayoría está unas horas o días y no continúan y Tecomán se caracteriza por eso, por el consumo de Heroína”.
Hurtado Martínez destacó que también se ha incrementado la cantidad de pacientes que ingresan y los que han terminado de forma satisfactoria, “creo que tiene que ver con que se le está dando mayor difusión a la clínica, con la difusión de la adicción como enfermedad, no tanto que son un estorbo y se les da la atención de la familia, saben que sí hay opciones regresar a ser lo que eran antes del consumo”.
Al cuestionarle cuáles son las colonias de donde más llegan pacientes, puntualizó “tenemos identificados puntos rojos en Tecomán, pero también la gente de esas colonias son quienes menos solicitan la atención porque es una forma de vida, ya no solo consumo sino venta, entonces menos quieren la atención, nosotros quisiéramos que ellos solicitaran el apoyo pero no es así”.