La corporación policiaca dio a conocer que además de Román García se detuvo a otras seis personas, a quienes se les aseguraron armas, drogas y vehículos.
Refirió que líneas de investigación señalan que este sujeto es presunto responsable de la logística operativa para la distribución de droga, plagios y homicidios de integrantes de grupos antagónicos, en especial de Los Zetas, con quienes disputan el control de la zona.
La detención fue resultado de los trabajos de seguimiento tras el arresto, el 1 de septiembre pasado, de David Rosales Guzmán, “el Comandante Diablo”, jefe de plaza del Cártel del Golfo en Monterrey, Nuevo León.
La corporación indicó que Román García, de 47 años, fue detenido el 18 de septiembre cuando se encontraba armado a bordo de un vehículo Volkswagen Jetta color gris, con placas de circulación SKC-1523, el cual estaba estacionado en la avenida Bernardo Reyes, de la colonia Bellavista.
En ese mismo sitio fueron arrestadas otras seis personas que estaban en dos automóviles: un Volkswagen Jetta color blanco, con matrícula SMN-6519, y un Nissan Tsuru verde, con placas 1342-MLA.
Los detenidos fueron identificados como Jonathan Abraham Castañeda González, de 21 años, y Juan Julio Castro Muñiz, de 29, vinculados con distintos homicidios.
Además fueron aprehendidos Jorge Alonso Ramos Solís, de 29 años; Juan Pablo Triana Aguilera, “el Pabis”, de 32; Pedro Antonio Martínez Sida, de 32, y José Alberto Girón López, “Josué”, de 37 años, presuntos informantes al servicio del Cártel del Golfo.
La PF precisó que esas personas están relacionadas con diversos ataques contra bares y homicidios ocurridos en Nuevo León, entre ellos el del establecimiento Elefante, el 7 de febrero, y al centro nocturno Woman, el 9 de marzo anterior.
Asimismo, se les relaciona con los homicidios de tres personas, dos en la colonia Progreso, el 30 de julio, y uno el 28 de agosto en San Bernabé; además del crimen de cinco personas en Santa Catarina.
También se les señala como responsables del ataque con artefactos explosivos contra elementos de la Policía de Fuerza Civil en Nuevo León, el pasado 4 de septiembre.
Durante el operativo fueron asegurados un fusil de asalto, con cargador abastecido con 16 cartuchos útiles, dos armas largas tipo escopeta, un cargador abastecido con nueve cartuchos, una granada de fragmentación, ocho envoltorios de marihuana y 500 de polvo blanco con las características propias de la cocaína, entre otros.
Los detenidos y objetos asegurados fueron puestos a disposición de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO).
Fuente: LA CRÓNICA DE HOY