TAREA PÚBLICA
Por: Carlos Orozco Galeana.
Las redes sociales son hoy la arena política por excelencia. Ya no son tanto los medios impresos, radiofónicos o televisivos y menos los partidos políticos los que procesan con mayor intensidad declaraciones de servidores públicos o discuten sus ideas o propuestas de trabajo, sus resultados o posicionamientos respecto a tal o cual aspecto de nuestra realidad.
Esto lo percibimos en nuestro terruño donde cuatro mujeres de una nueva hornada política tratan de diferenciarse subiendo a las redes todo tipo de informaciones así sean algunas insignificantes por lo que muestran. Como si se pensara al interior de sus equipos de asesores: que hablen de ellas, aunque sea mal. Es decir, se sigue la estrategia de la presencia cotidiana, atiborrando los sitios web de imágenes personales en actos intrascendentes como en los que aparecen personas necesitadas recibiendo una dádiva oficial de cuantía ínfima.
En fin, lo importante es que compitan por ver cuál trabaja más y mejor. Es buena la competencia en este sentido. Pero es mejor no enojarse. Es importante también que se sustituya las imprecaciones personales entre ellas y se eviten las confrontaciones que las disminuyen políticamente ante los ciudadanos – electores. Han de mostrar altura de miras, ser generosas y comprensivas, dialogantes, cordiales, bien portadas, devolver bien por mal a sus adversarios (as).
El lector se preguntará a cuáles servidoras públicas me refiero. Sus nombres: Margarita Moreno, They Gutiérrez, Griselda Martínez e Indira Vizcaíno.
Las tres alcaldesas aspiran a seguir sus carreras políticas y brincar peldaños más altos. Tienen derecho y trabajan para ello, que lo logren es otro boleto. Por su parte, Indira aspira seguramente a hacer las cosas lo mejor posible en la gubernatura y enrolarse en el equipo de la que aparece como favorita para alcanzar la presidencia de la república en el 2024, Claudia Sheinbaum, y a influir decisivamente para dejar a uno de los suyos (as) como sustituto(a). Para calentar el ambiente, apunte usted para ese potencial relevo gubernamental a Griselda Martínez, Rossi Bayardo y, para darle juego al priísmo, a Guillermo Navarrete Zamora, actual director general de Gobierno, considerado en el primorenismo para otros menesteres más elevados en el futuro. Pero habría que ver en ese tiempo para dónde apuntaría el dedo de Amlo. Indira tiene, reitero, el reto de hacer un buen gobierno, está siendo apoyada por el nivel central y la palabra fracaso no está en su horizonte.
Pero volviendo a nuestro tema, que es el de considerar la participación política del cuarteto de féminas, he observado que se ocupan de problemas comunitarios, están cerca de la gente, y que Indira no se queda atrás en tales menesteres. Con los “diálogos por la transformación”, una estrategia que permite el contacto directo y efectivo con la gente, y el cúmulo de giras y presencias en municipios, combinadas con una gestión de asuntos de mayor envergardura ( relacionados con las grandes obras, hechas con recursos federales, y con las acciones de seguridad ), mantiene presencia casi cotidiana, y además se beneficia políticamente de la aceptación que a nivel nacional sigue teniendo Amlo.
Griselda Martínez, alcaldesa de Manzanillo, sigue dando de qué hablar en términos positivos. Mantiene buena presencia en medios pero quizás la perjudique su temperamento cuando participa como militante morenista o muestra un discurso partidista olvidando que gobierna para todos. Pero así ha sido desde que llegó al cargo, siendo reelecta. Los ciudadanos así la aceptan y en su mayoría ven cómo sus actos se ciñen a propósitos de mejoría para los manzanillenses. Estará en la jugada en el 2024 con la mira puesta en dos posiciones.
Tey Gutiérrez, alcaldesa de Villa de Alvarez que llegó al cargo sorpresivamente, mantiene buena imagen y ha sabido conducirse con apertura y sensibilidad al interior del cabildo. Aspira a repetir ahí o a competir por otro cargo a nivel local o federal. Es buena carta para el príismo y la coalición tripartidista.
Y finalmente, Margarita Moreno, que se esmera en recorrer su municipio mostrando confusión en su rol pues da la impresión ocasionalmente que preside el Dif., aunque ha mostrado sensibilidad especial y un gran contacto con los habitantes del municipio. Es la más débil de las tres alcaldesas por su parentesco político con el anterior gobernador y por su esposo ahora diputado plurinominal quien puede ser sometido a juicio político próximamente. Pero intentará repetir en la alcaldía o competir por un distrito electoral local o federal. Es lo que tiene en el horizonte.
Reitero: toda competencia es bondadosa, exige a los interesados (as)hacer las cosas lo mejor posible y dar resultados satisfactorios. Es importante que la noción dominante en ellos y ellas sea el trabajo “fecundo y creador” y no la grilla barata, con la cual no se llega sino al ridículo y al fracaso.