En los últimos años, hemos sufrido las calamidades de la delincuencia organizada, delincuencia, que de manera galopante se ha apoderado de la tranquilidad de las familias colimenses, pareciera ser que no existe la panacea adecuada que conlleve a la solución de ese grave problema que nos afecta a todos, aunado a lo anterior, los abusos de las autoridades, las complacencias y negligencias de quienes tienen la responsabilidad política de proporcionar seguridad y bienestar a todos, la falta de visión para encontrar nuevos mecanismos que sirvan de solución a los grandes problemas de seguridad, de procuración de justicia y de administración de la misma, la incapacidad de personal en el combate frontal a la delincuencia organizada, debe obligar al estado a tomar decisiones urgentes, pues no es posible, que ante los eventos delincuenciales suscitados al amparo de la negligencia, incapacidad, y la falta de una policía confiable , la Procuraduría General de Justicia en el estado siga trabajando con los mismos esquemas que lo ha venido haciendo desde hace ya algunas décadas, la ciudadanización y descentralización del Ministerio Publico , la creación de una policía vecinal y de dos subprocuradurías regionales, la puesta en marcha de un verdadero instituto de Formación profesional y de una agencia de abatimiento al rezago así como, la modificación de los horarios laborales del personal ministerial , creando agencias del ministerio publico de tramite con horario corrido y la creación de agencias del ministerio publico con detenido con un horario de veinticuatro horas de trabajo por cuarenta y ocho horas de descanso, desde mi punto de vista provocaría una emergente reestructuración de fondo y de forma que facilitaría la labor de investigación de los delitos y la captura de delincuentes , lo que dará como resultado, eficiencia, eficacia, profesionalismo y sobre todo, certidumbre jurídica a los colimenses , pues no basta con el relevo indiscriminado del personal ministerial lo que dará la pauta a una mejor procuración de justicia, ya que es necesario trastocar las estructuras de dicha institución , para que las acciones emprendidas por personal adscrito, puedan tener resultados óptimos . No es posible que a estas alturas del partido, vivamos al amparo de instituciones que ya resultan obsoletas , que aun sigan laborando bajo las mismas premisas del pasado, no es posible que agentes del ministerio publico y oficiales secretarios carezcan de conocimientos de investigación, y de integración de averiguaciones previas , no lo digo yo, lo dicen los resultados que surgen de manera inevitable a la luz pública. La eficacia de la institución a la que me estoy refiriendo, no radica, única y exclusivamente , en la detención masiva de delincuentes, pues es necesario que estos últimos logren ser sentenciados por las autoridades judiciales, ya que en muchos casos, el órgano judicial al no encontrar elementos suficientes para dictar un auto de formal prisión los dejan en libertad absoluta, resultado, muchas veces, de una deficiente integración del cuerpo del delito y de la probable responsabilidad penal , logrando, con lo anterior, el incremento de la impunidad que lastima y ha lastimado siempre a la sociedad colimense. De ninguna manera y bajo ninguna circunstancia responsabilizo al personal ministerial, policial, pericial de trabajo social y psicología de sus deficiencias, pues dicha responsabilidad recae única y exclusivamente de quienes los contrato , pues son ellos los que tienen que implementar sistemas de capacitación, evaluación y selección de su personal, ya que mas de las veces son enviados a cumplir su cometido sin la mas mínima orientación y mucho menos capacitación para que cumplan con eficiencia su cometido viéndose obligados a seguir los mismos errores y las mismas deficiencias de sus antecesores . No es posible que sometan a personal de la procuraduría a exámenes de confianza que no revisten claridad en sus resultados, mas aun cuando el personal no recibió previamente capacitación y adiestramiento, pues solo son llamados de manera sorpresiva para someterlos a dicho examen que ante las obscuras y no muy claras reglas , se convierte en una formula de deshacerse de personal non grato y que después de muchos años de servicio a la institución y a los colimenses resultan que ya no son aptos para desempeñar su función o se ha perdido la confianza , ocasionando que muchas familias colimenses queden en desamparo ante el despido de quien es el único proveedor del hogar , orillándolo ante la falta de trabajo y de oportunidades en algunos casos a sumarse a las filas de la delincuencia organizada, situación que debe de preocupar al gobierno a efecto de corregir el camino y a dejar de desacreditar a su propio personal sin una capacitación y examen previo a su situación laboral, de no ser así , se seguiría violentando sus derechos humanos establecidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
