Análisis Político
Por: Abel González Sánchez.
Distinguidas candidatas y candidatos de los diferentes partidos que buscan la gubernatura, las alcaldías, las diputaciones locales y federales del estado de Colima.
Respetuosamente el suscrito ciudadano, común como somos todos los nacidos o radicados en este bello estado, me he permitido distraer un momento de su atención para que cada uno de ustedes como candidatos en sus diferentes niveles asuman con madurez y responsabilidad este momento histórico de la sucesión estatal que están viviendo durante los últimos días en sus campañas, y que están por concluir tres días antes del próximo 6 de junio, en este 2021 tienen sobre sus hombros también la obligación moral de asumir posturas para re direccionar el nuevo rumbo que los colimenses queremos para el Gobierno del Estado, Ayuntamientos, Congreso Local y Federal para los próximos años.
Marco Tulio Cicerón, un gran estadista político, filósofo y escritor romano, decía que un político mediocre es como un soldado que solo sabe acatar las órdenes superiores de quien lo designó, no ve más allá de su frente y desea la guerra y su justa compensación, pero los hombres que buscan el poder político para gobernar deben ser pacientes, pasar por varias etapas “La política es el arte de saber llegar al poder en su momento adecuado”.
Con la anterior reflexión política de los tiempos romanos, de Cicerón un gran líder y que será vigente por muchas otras generaciones, será necesario para que todos los candidatos de los diferentes partidos se hagan una auto evaluación personal, para medir la fuerza del partido que representa y su posibilidades reales para ganar su candidatura, y si no tienen esas posibilidades deben asumir y hacer lo más correcto y honesto por el bien del futuro de Colima.
Deben reflexionar que solamente uno de ustedes podrá ser gobernador, alcalde, diputado federal o local en el estado, sus municipios y distritos, y en los próximos días la ciudadanía apenas tomará la gran decisión psicológica por quién de ustedes votar, por tal motivo todavía es tiempo de salir y fortalecer su campaña, o bien pactar, renunciar y reflexionar para que direccionen ustedes mismos el voto a favor del desarrollo de Colima y no sean parte del juego perverso si los hay de los grupos nacionales o locales que engañan y pretenden solo dividir a los colimenses, pues solo ustedes saben lo que deben hacer porque traen cargando el costal. Conviene que reflexionen porque los próximos días son de las grandes decisiones.
El próximo lunes 17 de mayo por la tarde los candidatos a gobernador tendrán un gran debate que puede ser relevante para la elección, deben valorar bien sus propuestas, que no generen gran polémica como la reciente de Morena, de recortar ocho Secretarías del Gobierno del Estado de un plumazo, pues bien sabemos que si ganano hará ese recorte por decisión personal de la candidata, lo dijo solo para ganar votos al anunciar que beneficiará con becas a más de 30 mil ciudadanos, y la gente está deseosa de apoyos, pues recordemos que para que realmente haga ese recorte de las dependencias se necesita el acuerdo del Congreso Estatal y no sabemos quién ganará las diputaciones locales. Tampoco conviene que digan que aumentarán el salario mínimo, que bajarán la gasolina o la luz porque causan hasta risa, no sabe ni lo que dicen, cuiden más sus promesas y propuestas de campaña porque de todos modos lo dudamos que lo las cumplan, y esperamos que los que ganen representen auténticamente a los ciudadanos, porque se necesita hoy más que nunca que los que lleguen a gobernar y legislar sea mediante el consenso social, no mediante la ocurrencia personal, con la participación ciudadana y de los sectores involucrados en el desarrollo de Colima.
Por último, “El Arte de gobernar, Manual del buen gobierno” es un ameno ensayo de ciencia política y filosofía, en donde Cicerón hace valientes denuncias de corrupción y de política, les conviene adquirirlo para quienes les gusta la política porque es una guía para el buen gobernante y lo escribió un ilustre universitario colimense ganador de diferentes premios literarios, nuestro amigo Rogelio Guedea, vale la pena leerlo.