ANÁLISIS

0

Mal precedente: el arranque de la presente legislatura

Por: Luis Ávila Aguilar

Cuando las pasiones humanas se desbordan y el hilo conductor de la  actitud  es el odio, la frustración, el sentimiento de venganza contra el adversario o a quien se cree el enemigo a vencer, cuando la sinrazón obnubila la razón, se toman decisiones inadecuadas, impropias,  terminan haciendo ver mal a  quien las practica.

Así  arranca  la  actividad legislativa   la quincuagésima octava legislatura de Colima, en forma  especial por parte de  la fracción mayoritaria dominante del Partido Acción Nacional,  quien se ve mal de entrada por la actitud carente de convicción   democrática, pluralidad,  de ausencia de  respeto,  intolerante, pero sobre  todo avasallante ante el  adversario ideológico, en este caso la representación minoritaria,  en el pleno del congreso.

La actitud de los nuevos “tribunos” sienta un mal precedente dejando un olor poco  agradable ante el sentido de la opinión pública colimense,    al convertir  el escenario  de la máxima representación popular, en  un acto circense, en donde fueron violentados los principios más elementales, no sólo de ética política, si no la trasgresión a la ley y su respectiva reglamentación.

Vamos  por parte y sólo por enumerar  algunas violaciones a la ley orgánica del Congreso y su respectivo reglamento:

1.- No fue instalado legalmente el máximo órgano rector y de administración del actual Congreso del Estado, elemental  para el  funcionamiento de este  poder de gobierno;    La Comisión de Gobierno Interno,   en donde deben estar incluidas todas las fracciones legislativas representadas en la actual legislatura. (PAN, PRI, ALIANZA, PT, PVEM y MC), esto de acuerdo a la reglamentación en vigor. La falta de  integración  de esta comisión nos dice en consecuencia,  que no existe  gobernabilidad al interior de la presente legislatura.

2.- En la elección de la nueva mesa directiva se impuso la fuerza mayoritaria de sus integrantes como razón y se integró una directiva en donde se excluye a la segunda fuerza, la del PRI,  al quedar como presidenta la Diputada Martha Sosa Govea,  Riult Rivera Gutiérrez vicepresidente  y como primer Secretario a Crispín Guerra Cárdenas ambos también del Partido Acción Nacional, como segunda secretaria se “negoció” mayoritariamente a favor  de Leticia Zepeda Mesina del Partido Movimiento Ciudadano( por reglamento la primera secretaria debió haber recaído en la primera minoría, en esta caso para un integrante de la fracción priista, otra violación de ley amparados en el argumento de la supremacía mayoritaria).

3.- No bien arrancó la primera sesión legislativa el Diputado Riult Rivera presentó con el más carente uso de razón legal,   por donde se le observe, la iniciativa de contrarreforma a  la Ley Orgánica del Poder Legislativo,  en el sentido de excluir como integrantes de la Comisión de Gobierno Interno a los diputados únicos de partido, ( PT, PVEM, ALIANZA Y MC) que no podrán hacer fracción por ser únicos, por lo que tendrán que ser  excluidos en consecuencia  de las  prerrogativas ( dígase recursos económicos ) que les otorgaría ser integrantes de la comisión de gobierno.  Desconozco los motivos,   el silenció, comparsa o complicidad de la diputada Zepeda Mesina del Movimiento Ciudadano al no importarle según lo declaró,  ser miembro de la comisión aun cuando la contrarreforma es atentatoria contra sus intereses y de su partido. (El tiempo nos dirá sus motivaciones). Dicha iniciativa de reforma debió haber sido turnada a comisiones y presentada instaladas estas, al seno del pleno de la legislatura.

4.- La destitución del Oficial Mayor del Congreso del Estado de la misma forma, debió ser un asunto  resulto al interior de la inexistente aún Comisión de Gobierno Interno,  la propuesta de destitución fue de   facto al pleno y aprobada mayoritariamente por los integrantes panistas de la legislatura. Respecto a la remoción del funcionario, está claro que este por término de legislatura debería no sólo ser sustituido sino en forma personal, poner a consideración de la Comisión de Gobierno su renuncia correspondiente, la forma y el trámite es el que resulta violatorio a la ley.

Queda claro, desde mi particular punto de vista que la mayoría legislativa en el congreso, recayó por mandato popular en la fracción del Partido Acción Nacional, que la primera directiva debe estar por la misma razón en manos de un diputado integrante de esa fracción y que la Comisión de Gobierno Interno recae  por mandato de ley  en la fracción mayoritaria,  pero es de elemental y consustancial  a los principios democráticos y del derecho el respeto al adversario y a las formas legales y políticas que prevalecen.

No quiero pensar  ni mucho menos que el mandato popular expresado en las urnas el pasado 6 de junio demande este tipo de conductas, esperemos que el vaticinio de la actual presidenta, coordinadora de fracción y presidenta de la Comisión de Gobierno Interno Martha Sosa Govea, se cumpla por sus aportaciones positivas en favor de la sociedad y no en sentido contrario,  sea   “histórica” por este tipo de  actitudes,  que muchos colimenses, rechazamos,  vengan   de quien vengan.