*El Nuevo Instituto Electoral en México
Por: Luis Ávila Aguilar
Como recordamos, los procesos electorales en nuestro país hasta finales de los años 90, con la reforma electoral realizada por el presidente Zedillo quien “ciudadanizó” las elecciones a través de la creación del Instituto Federal Electoral, eran organizados por el Gobierno de la República a través de la Secretaría de Gobernación, quien se constituía, en juez y parte, en la calificación de la voluntad ciudadana.
Fue el presidente Ernesto Zedillo quien con el afán de recuperar la credibilidad del sistema electoral en nuestro país, impulsó una amplia reforma electoral en donde se constituye el Instituto Federal Electoral, integrado por un consejo ciudadano “apartidista” que cuenta, acredita y certifica mediante la expedición de la constancia correspondiente, el triunfo electoral de quien los obtiene, tanto en el nivel federal y estatal, con la integración de órganos ciudadanos similares.
Con el triunfo de la de la supuesta transición “ democrática” en donde resulta triunfador por primera vez en la historia de nuestro país, de la oposición y tras 70 años de hegemonía priista, del panista Vicente Fox, el Instituto Federal Electoral obtiene un voto de credibilidad ciudadano en su máximo nivel, que lo posicionó, incluso, como de la instituciones con mayor acreditación y aval de la gente.
Sin embargo, en el transcurso de los diferentes procesos electorales, la actitud de este órgano electoral se ve ampliamente cuestionada como resultado de las componendas partidistas, la falta de transparencia en el manejo de los recursos, la opacidad en la información y cuestionamientos públicos y bochornosos de sus integrantes.
En la actualidad dicho Instituto Federal Electoral se ha transformado, para bien o para mal, en un nuevo organismo rector de las elecciones en nuestro país, con el fin de rescatar esa credibilidad perdida y se constituye en la actualidad como Instituto Nacional Electoral en donde desde mi muy particular punto de vista, la diferencia con el anterior radica en la forma de elección de los consejeros electorales.
En la próxima semana entraran en funciones los 32 órganos electorales del INE, en donde los congresos de los estados a diferencia del anterior IFE, los consejeros no fueron nombrados por los congresos de los estados a fin de evitar la manipulación y la componenda política en la designación de sus integrantes; de entrada, ya están cuestionados en el país, sus integrantes, esperemos que este nuevo INE realmente funcione y para bien, en beneficio de la democracia de nuestro país, o de lo contrario, será más de lo mismo…