La Panga
Por: Mayahuel Hurtado Ortiz
En un acto de responsabilidad como columnista, he respetado el triunfo que la mayoría ejerció en las urnas para elegir a un presidente de la República que no fue por quien yo voté; de hecho, en este espacio mencioné una y otra vez que muchas de las promesas de campaña resultaban inviables, fui objeto de ataques por pensar y opinar diferente; de igual forma, siempre me sostuve en la tesis de “la anestesia electoral” y la de “una elección de emociones”, en donde la gente emitiría su voto como resultado de un malestar o de buscar castigar a alguien por cualquier situación o desfortunio.
Sin embargo, con ojos cerrados y las emociones en un punto de ebullición, la gente salió a votar por un cambio, y así fue: Ganó la voluntad expresada en las urnas y a poco más de dos meses de que inicie este periodo, 68 días para ser exactos, las promesas que hiciera Andrés Manuel López Obrador durante la campaña se han ido desvaneciendo de forma paulatina, en algunos casos es AMLO quien emite declaraciones que contradicen sus promesas y en otras son los colaboradores cercanos o quienes serán integrantes de su gabinete.
Raymundo Rivapalacio, Ricardo Alemán, Pablo Hiriart, Denisse Dresser, Héctor de Mauleón, entre otros líderes de opinión, han dado puntual seguimiento y han tenido la cualidad de estar analizando el comportamiento de quien ocupará la silla del águila, citando cada uno de los movimientos, declaraciones, acciones o reversas que desde la figura de Andrés Manuel López Obrador y quienes junto a él conformarán el equipo de gobierno durante esta transición democrática.
Error de cálculo o no, las contradicciones del discurso electoral y lo que será llevar a cabo los programas gubernamentales, proyectos diversos, como la creación de una refinería, el tema del Tren Maya, las revisiones a las reformas hacendaria, energética, educativa, así como los temas de pensiones para adultos mayores, bajar el costo del precio de gasolina y diesel, así como la participación de la mujer en política, siguen siendo temas que inquietan y preocupan a toda la nación.
Todos deseamos que a México le vaya muy bien, que el cambio por el que muchos votaron sea realmente el que veremos de forma paulatina los próximos años. Sin embargo, los expertos, los analistas políticos y los empresarios, quienes son los generadores de la economía y empleos, cada día dejan constancia de la enorme preocupación que impera porque un día sí y al otro también circulan declaraciones de AMLO o noticias en las que se ve la escasa viabilidad para trasladar a la realidad las promesas y buenas intenciones que se tuvieron en campaña.
Y es que a todos nos queda claro que la lucha contra la corrupción debe ser el primer paso, pero también lo debe ser contar con un proyecto de nación que garantice que millones de mexicanos recibirán los beneficios que durante la etapa electoral fueron los que tocaron esas fibras sensibles y lograron que salieran a votar los mexicanos, en un ejercicio democrático nunca antes visto, en donde fue la voluntad ciudadana la que entregó al país.
Estamos ya en la antesala de este ejercicio de transición y aunque algunos integrantes del partido que llevó al triunfo no se han caracterizado por ser ejemplares, son más quienes tienen el compromiso con millones de ciudadanos de hacer un buen trabajo legislativo en las dos Cámaras.
Son 68 días los que nos separan del nuevo despertar, esperemos que éste sea el que merece México, porque así será, por eso la votación eligió a un presidente de la República, senadores, diputados federales, diputados locales y alcaldes.
Compartiré dos pensamientos, el primero pertenece a Joseph de Maistre, un teórico, político y filósofo francés (1753-1821), quien sostuvo “que cada pueblo o nación tiene el gobierno que merece”; sin embargo, el segundo escrito, del francés André Malraux político y novelista (1901-1976), la modificó y dijo que “no es que los pueblos tengan los gobiernos que se merecen, sino que la gente tiene los gobernantes que se le parecen”.
El reloj está con su inexorable aguja marcando la cuenta regresiva para “El fin de régimen de democracia incipiente”, lo descrito en el ensayo de Lorenzo Meyer editado y publicado desde el 1° de junio de 1998, 20 años después, México da un giro a la izquierda. Al tiempo.
LOS REMOS DE LA PANGA
REMAZO: Vivimos en un país de leyes e instituciones. Por lo tanto hay que estar confiados en que las resoluciones de las autoridades electorales son apegadas al Estado de derecho. Me parece que Virgilio Mendoza y sus seguidores del Partido Verde están equivocados al culpar al PRI de la pérdida de la diputación local plurinominal. El Revolucionario Institucional no quita ni da posiciones de representación popular, las dan los votos y los que califican los votos son las autoridades electorales.
REMO: Hay una gran expectativa por conocer los nombres de quienes serán los integrantes del gabinete de Griselda Martínez, alcaldesa electa de Manzanillo. Se espera que sean manzanillenses la mayoría de los nuevos funcionarios. Faltan unos días para despejar la incógnita.