La contaminación es tremenda ya que las fuentes de aguas cloacales, emiten fétidos olores que se esparcen por varias colonias, en un problema que las autoridades han dejado de lado.
Vecinos de la zona indicaron que ya han denunciado este problema, pero la respuesta de CAPDAM, es que están dando prioridad a las afectaciones ocasionadas por el paso del huracán.
Desde hace dos días una de las alcantarillas ubicada a la altura de la base de policía 32, a unos metros de la entrada a los bachilleratos de la Universidad de Colima, entre las colonias Francisco Villa y Jabalinera, registra un imparable torrente de aguas residuales, que se ha expandido por todo el arroyo.
El nauseabundo cause se abre paso entre el lodo y las ramas que aun se encuentran en el arroyo de Santiago.