Carlos García Lemus|COLIMANOTICIAS
Colima, Col.- Cuando los colimenses tenían altas expectativas de la 58 Legislatura del Congreso del Estado, por ser histórica al haber una mayoría panista, la realidad es que en los primeros días, los diputados han mostrado poca o nula capacidad política para llegar a acuerdos y tanto priistas, que no se resignan a que son minoría, como panistas, que no saben ejercer una mayoría responsable, han resultado un fiasco que tiene estancado al Poder Legislativo.
Ni unos ni otros, con sus aliados, han sabido ya no digamos lograr acuerdos, ni siquiera han mostrado voluntad para avanzar y, enfrascados según ambos bandos en hacer que se respete la legalidad, llevan ya casi una quincena sin ningún avance y están causando aún más hartazgo entre la población.
REFORMAS Y CONTRAREFORMAS
La discusión entre panistas y priistas en el Congreso del Estado, se ha centrado en el tema de la legalidad, luego de la reforma que los albiazules y su incondicional legisladora de Movimiento Ciudadano, hicieron el 1 de octubre a otra reforma que a su vez habían aprobado el PRI y sus aliados el último día la anterior legislatura.
En palabras simples y para no entrar en lo que tanto discuten los diputados (como si en realidad conocieran a fondo la ley) de que si el artículo 86 de la Ley Orgánica del Congreso del Estado o que si los artículos 137 y 141 del reglamento interno, en realidad el problema es el control interno de ese Poder Legislativo que siempre tuvo el PRI y ahora se niega a perder sin tratar de rescatar algo.
El PAN por su parte, llegó con la idea de que si por tantas décadas los han mayoriteado, es momento de la venganza y, lamentablemente, así lo han manejado, sin inteligencia, sin capacidad política y, en el caso de ambos bloques, valiéndoles muy poco lo que los ciudadanos esperan de ellos una vez que pasó el proceso electoral de este año.
LA APLANADORA PANISTA
Con una visión muy corta, anteponiendo el rencor por todo lo que huela a PRI, el PAN llegó a la presidencia del Congreso del Estado avasallando, negándose al diálogo y cometiendo atropellos no solamente contra priistas reconocidos, sino contra todos los trabajadores del Legislativo.
A tal grado llegaron, que en tribuna la presidenta, Martha Sosa Govea, corrió al Oficial Mayor Miguel Chávez, por supuesto desacato y a todos los trabajadores que de él dependían, es decir, todos: directivos, trabajadores de base, sindicalizados y de confianza.
Pues así, disfrutando de su momento como presidenta del Congreso, Martha Sosa dijo que corría a todos los empleados del Congreso del Estado, esto ante la aprobación de sus correligionarios, de la diputada de MC y de los aplaudidores que en cada sesión llegan al Congreso del Estado a gritarle lo que se les antoja a los priistas y a burlarse de su actual situación de minoría.
Es una pena que esto ocurra, pues además del mal gusto y la cobardía que representa insultar a los diputados en minoría desde el anonimato de las butacas del recinto, el revanchismo no es lo correcto, porque a final de cuentas, para la mayoría de los ciudadanos los políticos son la misma cosa, sean del partido que sean y los diputados son de los más reprobados por la sociedad, precisamente por su falta de trabajo al servicio de la gente (salvo contadas excepciones).
Finalmente Martha Sosa se desdijo y esa misma tarde dialogó con los trabajadores sindicalizados (algunos ya estaban dramatizando porque según ellos los iban a correr, cosa que no ocurrió).
PRI DESORIENTADO
Y si los panistas no han sabido manejar la mayoría, se ve que a los priistas el ser minoría los tiene muy desconcertados y no han tenido una buena capacidad de respuesta.
Hay que decir que no contaban con el resolutivo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que de último momento le dio dos diputaciones más al blanquiazul, con lo que alcanzaron los 13 votos, que es ya mayoría para aprobar muchas cosas en el Congreso.
Tendrán que acoplarse los tricolores y atender el llamado de su nuevo líder natural, el gobernador electo José Ignacio Peralta Sánchez, quien en entrevista el viernes anterior, afirmó que en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se debe reconocer que es una minoría y por lo tanto, la oposición en el Poder Legislativo y “debemos de trabajar estando muy claros y conscientes de esa situación que es la que prevalece”.
Agregó que tiene confianza en que se logren los acuerdos en el Congreso del Estado y expresó su absoluto respeto al Poder Legislativo.
Para Nacho Peralta existe madurez política por parte de todos los actores en el Congreso del Estado y por tanto condiciones para que se logren finalmente los acuerdos.
Y remató: “es importante tener un Congreso armonioso al interior del mismo y por lo tanto con otros poderes como lo son el Judicial y el Ejecutivo”.
Sobre si la mayoría que existe por parte del Partido Acción Nacional (PAN) podría impedir las acciones del gobierno que encabezará a partir del 1 de noviembre (si el TEPJF válida la elección), Peralta Sánchez enfatizó que existen a nivel nacional situaciones similares y siempre se logran los acuerdos.
“Estoy seguro que habrá altura de miras y que siempre se antepondrán los intereses de Colima y los colimenses por encima de las diferencias partidistas y eso es lo que precisamente permitirá que haya acuerdos legislativos y por lo tanto un trabajo productivo a favor de Colima”.
Finalmente dijo que su relación con el Congreso del Estado será institucional y una vez que asuma el cargo, dialogará con la presidencia del Poder Legislativo, en este momento Martha Sosa.
EXPECTATIVA
Así, tras ese llamado de Nacho Peralta a los priistas y una vez que los panistas entiendan que algunos cosas sí las podrán aprobar con 14 votos, pero para otras necesitarán 17, al parecer el fin de semana anterior sirvió para algunos acercamientos en busca de acuerdos.
Y así debe ser, pues de otra forma el Congreso no caminará, por más que los panistas piensen que solos pueden sacar todo.
El asunto está en un momento en que ni siquiera se han formado las Comisiones para trabajar las iniciativas al interior del Congreso.
Hay dos Comisiones de Gobierno Interno y Acuerdos Parlamentarios, una aprobada por el PRI, PVEM, Nueva Alianza y PT, con la ley de la reforma aprobada el 30 de septiembre y otra aprobada por PAN y MC integrada, según ellos, por el PAN y el PRI, aunque este partido ha dicho que no participa en ella porque es ilegal.
Entonces, cualquier iniciativa que se presente, como la de Nicolás Contreras y la fracción del PAN el martes pasado, para derogar la tenencia, en este momento no es más que una vacilada o tomada de pelo para los colimenses, pues en la sesión se acordó turnarla a Comisiones, como señala el reglamento, pero resulta que en la actual legislatura esas comisiones no existen simple y sencillamente porque no se han conformado por el pleito que traen nuestros flamantes legisladores.
Así que ya lo sabe amable lector, en estos días cualquier diputado puede solicitar a sus asesores que le preparen una iniciativa (porque no crea usted que ya llegaron con la tarea hecha), pero una que sea apantallante, que jale los reflectores y se lleve la nota de ocho columnas, al cabo que se turnará a comisiones que no existen y lo más probable es que se quede en el limbo.
ARMANDO GARCÍA A COMUNICACIÓN
Por todo este enredo, tampoco se ha podido nombrar al nuevo director de Comunicación Social del Congreso, pero todo parece indicar que Armando García Chávez asumirá hoy el cargo.
Habrá que puntualizar que la función de un director de comunicación social de cualquier dependencia u organismos, no es “controlar lo que dicen los medios”, sino difundir el trabajo de la institución y mantener una relación de respeto con los medios de comunicación.
Por lo que de confirmarse que el director de esa área será Armando García, quien por cierto, sí tiene experiencia en el área (fue el responsable de ella en el Ayuntamiento de Manzanillo, en la primera etapa de Virgilio Mendoza) se trata de una persona que sí conoce su labor.