Análisis Político
Por: Abel González Sánchez
*La imagen superior es el Diploma que la pequeña hija del joven policía abatido en Tecomán le hizo precisamente el día del padre, pero antes de recibirlo de manos de la niña en la ceremonia de su escuela, ocurrió su asesinato.
Con el emotivo homenaje de cuerpo presente al joven policía estatal originario de Tecomán abatido esta semana por el cumplimiento a su deber, José Alfredo Fernández Rodríguez, fue despedido, y quien apenas hace dos meses fue designado Delegado Regional de Tecomán, Armería e Ixtlahuacán de la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Estado, allí presenciamos el llanto desgarrador de una gran familia, madre, padre, hermanos, sobrinos, su esposa y su niña, cabe preguntarnos; ¿Vale la pena ser policía?
Alejandro Guerrero Guerrero Director General de la Policía Estatal del Gobierno del Estado en presencia de los diferentes mandos estatales, federales y municipales de seguridad, así como un gran número de policías estatales y la familia del policía abatido dijo; “Momentos antes de ser abatido, su pequeña hija le había entregado un diploma como el mejor papá del mundo”, gracias por tu amistad Pony, gracias por tu compañerismo, lealtad, respeto, disciplina e institucionalidad. hoy Pony, te vas al frente y como siempre, te seguiremos y en algún lugar nuevamente nos encontraremos para volver escuchar las órdenes de alguien para continuar velando por los que más queremos.
A nombre de los policías estatales Miguel Huerta Navarro, dijo entre otras palabras; “Solo notros sabemos el esfuerzo, el sacrificio y el desvelo que padecemos para buscar la paz y recobrar la tranquilidad social.
Por lo anterior analizamos políticamente que además del homenaje póstumo a los policías más distinguidos por su trabajo, necesitamos ir más allá para reflexionar como sociedad colimense sobre los riesgos que los policías corren y más aún para que los diputados locales, senadores o diputados federales busquen en el Congreso del Estado, las Cámaras de Senadores y Diputados federales y con los Ayuntamientos hagan un frente común para buscar alternativas para proteger y salvaguardar el futuro de los policías y sus familias, ya que son los policías municipales los que viven muchas carencias por falta de recursos, afortunadamente la policía del gobierno estatal tiene más prestaciones que el promedio nacional y Nacho Peralta emprendió nuevas medidas de apoyo que podrán ser dadas a conocer en este 2018.
Curiosamente sobre este mismo tema ayer por la noche ante un abarrotado auditorio el maestro Rubén Pérez Anguiano presentó el libro denominado “El México que Merecemos” escrito por José Antonio Meade en donde el candidato presidencial precisa en el tema de la inseguridad pública en México que no podrá combatirse si no se implementa un nuevo modelo de fortalecimiento real a los propios policías y si no se mejora la coordinación de los mandos federales, estatales y municipales, y repite en su página 43 que deberán buscarse las mejores alternativas para dignificar realmente la labor policial, porque es la base para darle un nuevo enfoque en el país.
José Alfredo Fernández, el policía abatido, era un joven de 35 años de edad apasionado por la labor policial quien le dedicó tiempo para capacitarse y aprender el maneja de las armas para enfrentarse a la lucha por la inseguridad, para el Pony sí valía la pena ser policía porque estaba orgulloso de su profesión, por ello fue designado en Tecomán como Delegado, que en paz descanse.
México y naturalmente Colima enfrenta ahora uno de los desafíos más preocupantes de su historia moderna por la vertiginosa transformación de la problemática social, muchos jóvenes ingresan a los cuerpos policiales por la necesidad de un empleo debido a la presión que tienen por sus padres o por necesidad personal de tener un ingreso, pero muchos otros como José Alfredo y como los hay en su mayoría en los cuerpos policiales sí les apasiona el trabajo que realizan aún con las carencias que señalan, por tal motivo Pony quedará grabado en la historia reciente de la policía estatal de Colima.