Por: Gustavo López Solórzano
Hay descuido y desprecio por los espacios verdes en las grandes ciudades. Falta continuidad en las políticas y cada nuevo funcionario juega a ser Dios. La degradación de los espacios verdes refleja la degradación de la sociedad. Sonia Berjman, Doctora en Filosofía y Letras
El medio ambiente sigue reclamando con urgencia de nuestra participación para conservar la vida natural y por ende, la de todo ser vivo. Por ello considero relevante que el delegado estatal de la PROFEPA, Como un justo reconocimiento a su responsabilidad, honestidad, compromiso y preocupación por la protección y preservación del medio ambiente y los recursos naturales; así como el respeto a la legislación ambiental vigente, haya credencializado a 37 vigilantes ambientales voluntarios en el Área Natural Protegida Reserva de la Biosfera Sierra de Manantlán, a través de cuatro Comités de Vigilancia Ambiental Participativa de las comunidades de Zacualpan y Campo Cuatro, en el municipio de Comala, y El Terrero y La Reserva, en Minatitlán.
Los recursos naturales que consume el hombre al año exceden la capacidad de regeneración de la Tierra. Así, al igual que se puede retirar más dinero de una cuenta bancaria de lo que se tiene, quedándose uno en números rojos, se puede extraer cada año más madera de un bosque de lo que vuelve a crecer o se pueden capturar más peces de los que nacen. Es entonces cuando suceden episodios como el del atún rojo del Mediterráneo, hoy al borde del colapso.
Importante, urgente, que habitantes de las diferentes comunidades de nuestro estado. Hoy sea corresponsables en el cuidado y preservación de su entorno, debidamente acreditados como guardianes del bosque y que sean ellos mismos, los que saben y conocen de las necesidades más apremiantes en materia ambiental. Algo relevante, es que en el área natural protegida y conocida como Reserva de la Biosfera Sierra de Manantlán, se mantiene la inspección y vigilancia con el apoyo de los cuatro Comités de Vigilancia Ambiental Participativa.
No está de más recordar que, son muchos los países que se han unido en una gran cruzada en favor del medio ambiente y que a la par de organismos internacionales, vienen trabajando con ahínco. Por ello, la finalidad de conformar los Comités de Vigilancia Ambiental Participativa en nuestro estado, radica en organizar y coordinar actividades con los dueños y poseedores de los recursos naturales, para su adecuada conservación y aprovechamiento y fortalecer sus funciones para la oportuna detección de delitos y presentación de denuncias ambientales.
Casi 1.800 millones de personas estaban viviendo en áreas con estrés hídrico grave, según un informe de la Unesco de 2006. Para 2025, se estima que 5.500 millones de personas vivirán en zonas con un estrés hídrico de moderado a grave. La humanidad, en resumen, está usando recursos por encima de la capacidad de regeneración de la naturaleza. De seguir así, el hombre necesitará dos planetas por año para cubrir sus necesidades en 2030 y 2,8 en 2050. La pregunta final es: ¿quién sobrevivirá si no hacemos algo para frenar y en su caso revertir esta problemática que nos afecta a todos? Es cuánto.