Por: Gustavo L. Solórzano
Para bien de todos los ciudadanos mexicanos el pasado miércoles terminaron las campañas políticas. Entre consignas, refrendo de promesas, descalificaciones y fantasías, los candidatos de los diferentes partidos que aspiran a servir a la sociedad mexicana, los candidatos reafirmaron su llamado al voto.
Sin duda es la mejor arma de la democracia, ejercer nuestro derecho al votar y elegir a quienes nos convencieron con sus propuestas. Descansemos pues de esta jornada con rumbo a las votaciones y preparemos nuestra conciencia y patriotismo para acudir a las urnas el domingo uno de julio, hagámoslo temprano y demos ejemplo de buenos ciudadanos, demos ejemplo de bien y mantengamos nuestro respeto a quienes difieren de nuestra simpatía partidista. Gane quien gane, gobernará para todos, deberá hacerlo sin distingos y en un marco de concordia, civilidad y buena voluntad. Gane quien gane, los mexicanos necesitamos sumarnos al nuevo proyecto de gobierno que encabecen quienes resulten electos para ocupar los diferentes responsabilidades que tendrán como patrones a los mexicanos que votemos.
Ha sido una contienda sin cuartel, los aspirantes salieron a la calle con todo, algunos con probada experiencia y otros solamente con las ganas que nacen de querer servir. Se quedan atrás desvelos, mal pasadas, diferencias de criterio y hasta algunas mentadas y no precisamente de menta. Hoy los colimenses y mexicanos como buenos ciudadanos necesitamos cerrar la puerta del pasado inmediato y abrir la ventana de la unificación, de la esperanza y de la reconciliación. Creer y confiar en nuestras instituciones y de verdad, prepararnos para ser parte activa, determinante, en lo que se prevé, habrá de ser una jornada electoral sin precedente en la historia de nuestro país. Es tiempo de que gane México, es tiempo de que nos vaya bien a todos y eso solo lo podemos lograr ejerciendo nuestro derecho, seleccionando de esa oferta laboral al personal que trabajará para nosotros, sus representados.
Los mensajes han sido claros, tanto el presidente de la república como el gobernador de nuestro estado nos convocan para hacer de esta, una jornada ejemplar. En donde priven la razón y la sensibilidad que permitan a la ciudadanía expresarse con libertad y respeto en este ejercicio ciudadano. Gane quien gane necesita entender que la nuestra, es una sociedad que no tolera mentiras, abusos, ni corruptelas. Vivimos en una sociedad que conoce, que participa y que espera mucho de los compromisos, que no promesas, de campaña. Es tiempo de sumar, de aportar, de sanar distancias y reitero, de gobernar y servir sin distingos, con buena cara y con humildad. Por México, por Colima, por nuestras familias, mi voto es por la paz.
ABUELITAS:
El mejor trabajador es el que evita problemas a su jefe, esa es una máxima aquí y en Corea, naturalmente el peor trabajador será aquel que haga lo contrario. En pleno siglo XXI, suena ilógico que haya gente que se siga reuniendo en la penumbra de su miseria para afectar a otros, indudablemente el envidioso termina tomando su propio veneno y cayendo en la fosa que el mismo ha cavado. Nombres, nombres, decía Salvador Zamora González. Es cuánto.