TONALTEPETL

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Por: Gustavo López Solórzano

Para mis maestros, especialmente para aquellos que me motivaron a expresarme libremente.

En 1942, los nativos descubrieron que eran indios, descubrieron que vivían en América, descubrieron que estaban desnudos, descubrieron que existía el pecado, descubrieron que debían obediencia a un rey y una reina de otro mundo y a un Dios de otro cielo, y que dios había inventado la culpa y el vestido y había mandado que fuera quemado vivo quien adorara al sol y a la luna y a la tierra ya la lluvia que moja. Eduardo Galeano, escritor uruguayo, fragmento de Los hijos de los días.

Después de definir la fecha para el siguiente viaje, lo que seguía era fijar las condiciones económicas en que se emprendería, de tal forma que el 17 de abril de 1492 se firmaron los acuerdos llamados Capitulaciones de Santa Fe. En estos documentos, se le concedió a Colón el oficio de Almirante de la Mar Océana en forma vitalicia y hereditaria, y se le nombró Virrey y Gobernador de las tierras que pudiese descubrir. También, se acordó entregarle la décima parte de todas las ganancias que se obtuvieran y el derecho de contribuir con la octava parte de los gastos, recibiendo igual proporción de las ganancias. (Así hasta yo viajaba)

Considerando el abuso, la masacre, los saqueos, el borrón cometido a sangre y fuego a la cultura existente, las imposiciones, y todo aquello que vulneró severamente la vida de  quienes habitaban en la “América” descubierta, podemos entender que el 12 de octubre nada tenemos que celebrar. Es necesario leer la historia contada por aquellos que sufrieron en carne propia el avasallamiento de una fuerza armada no solo con pólvora, sino también con engaños y hambre de poder. La versión de los vencidos, de los de abajo, nos deja muy claro que el arribo de los europeos a tierras americanas fue una gesta sangrienta masiva que provocó el exterminio de vastas civilizaciones, a quienes no solo les quitaron sus creencias, su cultura, sus tierras, su oro y su plata, sino que también los despojaron de su identidad ancestral.

Muchas y graves fueron las consecuencias de esa fatídica fecha, enfermedades no conocidas, vergonzosamente la esclavitud se convirtió en algo normal en esa América descubierta hasta finales del siglo XIX. Una nueva clase social triunfó: la burguesía criolla (americanos de origen europeo), que fue la gran protagonista de la vida americana en abierta rivalidad con los funcionarios metropolitanos europeos. “El más feroz racismo de la historia latinoamericana se encuentra en las palabras de los intelectuales más célebres y celebrados de fines del siglo diecinueve y en los actos de los políticos liberales que fundaron el Estado moderno. A veces, ellos eran indios de origen, como Porfirio Díaz, autor de la modernización capitalista de México, que prohibió a los indios caminar por las calles principales y sentarse en las plazas públicas si no cambiaban los calzones de algodón por el pantalón europeo y los huaraches por zapatos”. (Eduardo Galeano)

Leer y conocer la historia con toda su crudeza y no aquella que reescribieron maquillada nuestros pensantes escribanos, es la única forma de poder sintonizarnos con la verdad, con una realidad que hoy a pesar del tiempo se está manifestando, el hombre y la mujer de nuestro presente están regresando a nuestras raíces y reconociendo un ayer de gloria que sigue vivo, me queda claro que, “Esta raza inferior había descubierto la cifra cero, mil años antes de que los matemáticos europeos supieran que existía. Y habían conocido la edad del universo, con asombrosa precisión, mil años antes que los astrónomos de nuestro tiempo. Los mayas siguen siendo viajeros del tiempo: ¿Qué es un hombre en el camino? Tiempo”. (E. Galeano) 12 de octubre, nada que celebrar.

ABUELITAS:

En la mágica coincidencia de la vida espiritual,  las almas establecen un acuerdo para que al pasar por la tierra el aprendizaje sea fértil. La materia nos envuelve y entonces establecemos compromisos materiales que más que temer a la muerte, nos hacen temer a la vida. Tardíamente expreso mi acompañamiento afectuosamente solidario Para Cesar y Omar por la trascendencia de su padre, Don Ángel Cárdenas Tinoco, solido pilar de su familia y maravilloso cómplice de la creatividad. Es cuánto.