Juan Carlos Flores|COLIMANOTICIAS
Colima, Col.- En el 2015, el proyecto de la plaza Lagunas Shop fue presentado como “el Andares de Colima” a los posibles locatarios.
La plaza comercial, según sus dueños, tendría varias tiendas ancla como “Starbucks”, un banco, valet parking y un techo retráctil con tecnología alemana “para ver las estrellas”.
Una de las locatarias, Gloria Zárate, propietaria del salón de belleza “Mondou”, explicó que se cambiaron a inicios de 2016, tras ser contactados por personal del socio mayoritario Horacio Alejandro Cervantes.
Pedro Flores, copropietario de “Mondu”, agregó que las condiciones para los locatarios eran muy exigentes para los que comenzaron a instalarse en la plaza. “Querían que todo fuera de lujo, acabados de primera, incluso me señalaron un pequeño agujero que tenía afuera de mi establecimiento, pero todo mi local tenía piso nuevo, plafón y otros terminados de primera calidad”, dijo.
Signaron un contrato de promesa de compra y a través de un fideicomiso bancario, los dueños pudieron ofrecer en renta los locales además de exigir una cuota de mantenimiento.
Pero los problemas iniciaron con el retraso de la apertura de la plaza y a la entrega de los locales: primero la establecieron en julio de 2016 pero comenzaron formalmente el 1 de octubre de ese año.
Desde entonces, los administradores no han invertido en publicitar la plaza, el valet parking duró unas semanas, el mantenimiento de la plaza fue deficiente y comenzó a acumularse el polvo y suciedad en los baños.
Para empeorar la situación, el diseño de la plaza fue inadecuado: instalaron un techo (que no era el prometido) que provocó más calor hacia el interior por lo que comer en la zona de alimentos era casi imposible. “Y estamos hablando de diciembre, cuando la temperatura era baja”.
El ingreso a otros sitios era complicado: había que subir por unas escaleras para terminar con pasillos sin conexión, por lo que los clientes se perdían o rodeaban mucho.
Un caso extremo fue la instalación de un elevador: en lugar que comprarlo, fue contratado a una empresa que podía manejarlo a través de una señal satelital, de tal manera que si los administradores no pagaban el servicio, podía ser desconectado.
Y esta situación casi provoca una tragedia: una empleada que utilizaba ácido para la limpieza quedó atorada en el elevador al querer subir a la segunda planta; después de casi tres horas de labores de rescate, personal de Protección Civil logró abrir las compuertas y sacar a la intendente. Luego del accidente, la mujer renunció.
El drenaje de la plaza provoca olores fétidos, continuó Flores, lo que ocasiona que muchos locales tengan problemas con sus clientes que huyen por las pésimas condiciones ambientales.
Habían prometido una afluencia de mil 500 personas diarias, prosiguió, pero no llegan más que 50.
De los 60 locales que se ofrecen en renta, apenas 14 están ocupados, algunos de ellos, sólo tienen una lona de próxima apertura.
El restaurante “Las espadas de Brasil” fue uno de los últimos en ser desmantelado y reubicado por la pésima administración de Lagunas Shop.
También se había instalado la tienda de helados “Dolphy” pero ante la poca afluencia, abre pocas horas al día o de plano está cerrada.
De los eventos mensuales que se prometieron para generar atracción de público, sólo se hicieron tres a finales del año pasado.
El propietario de “Mondou” aseveró que ante esta situación, los locatarios se unieron y presentaron un pliego petitorio para remediar sus problemas y para presionar suspendieron su cuota de mantenimiento.
Pero la respuesta fue la intimidación pues los administradores cortaron el servicio de agua potable.
Por tal motivo, decidieron reubicar su local a otro sitio e interponer una denuncia ante la instancia correspondiente, pero lamentó que esta situación haya provocado el declive de un proyecto empresarial de mucha inversión.