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México.- El 17 de diciembre de 2017, el precio del bitcoin en la casa de cambio de criptomonedas CoinMarketCap era de alrededor de 20 mil dólares. Sus partidarios más férreos esperaban que solo fuera el principio.
Un analista de un banco de inversiones danés predijo que el bitcóin podría llegar a valer 100 mil dólares para finales de 2018. El año todavía no termina, pero cuando The Economist fue a imprenta, el precio del bitcóin era de 4,223 dólares y con tendencia a la baja. Además, el destino del bitcóin también marca el de otras criptomonedas. Ether, la segunda criptomoneda en cuanto a popularidad, bajó de 1432 dólares en enero, a 120 dólares en la actualidad.
Estos cambios marcan el fin de la tercera burbuja de las criptomonedas (las otras ocurrieron en 2011 y 2013). No se sabe bien qué la propició. Explicar los movimientos de mercados amplios y líquidos es complicado, en el mejor de los casos. Peor aún, los mercados de criptomonedas no son ni lo uno ni lo otro. Una teoría popular es que ya se agotó la oferta de compradores valientes dispuestos a probar su suerte.
El interés de los reguladores quizá sea otra razón. Las criptomonedas han sido por mucho tiempo un refugio para los estafadores. Ahora, los encargados de la legislación han comenzado a poner atención. El Departamento de Justicia de Estados Unidos investiga la manipulación de precios en las criptomonedas, y el consenso general es que es muy común.
La Comisión de Bolsa y Valores (CBV), otra agencia reguladora de Estados Unidos, investiga varias ofertas iniciales de moneda (ICO, por su sigla en inglés). Estas ofertas son tretas para recaudar dinero mediante la venta de fichas a los inversionistas, quienes las adquieren con la esperanza de que el valor de las criptomonedas aumente en el futuro; este año, llevan recaudados 7300 millones de dólares. Algunas ICO son estafas totales y las empresas desaparecen en cuanto venden las fichas. Sin embargo, incluso las ICO honestas podrían ser ilícitas. El 8 de noviembre, la CBV acusó al fundador de la casa de cambio de criptomonedas EtherDelta de operar una bolsa de valores sin registro.
Una causa más fundamental es que el bitcoin todavía está muy lejos de la meta hipotética de convertirse en una alternativa digital al dinero ordinario. Debido a sus complicaciones técnicas, además de la volatilidad que lo hace tan atractivo para los especuladores, no es fácil utilizar el bitcoin para comprar bienes. El banco Morgan Stanley determinó que solo tres de los 500 minoristas en línea más grandes lo aceptaban en 2017, dos menos que el año anterior.
Quienes están dispuestos a apostar se preguntan cuánto más puede bajar de precio. Nadie lo sabe, pero la esperanza es lo último que muere. Smartereum, un sitio web de criptomonedas, plantea con gran fervor que el bitcoin podría regresar a los 50 mil dólares, o incluso a los 100 mil, antes de que concluya el año. A fin de cuentas, el comprador corre el riesgo.
Fuente: DINERO EN IMAGEN